El presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, ha anunciado hoy el comienzo inmediato de las obras de rehabilitación integral del asfalto de las autopistas de la isla por importe de 23,3 millones de euros, y ha pedido a los conductores comprensión por los inconvenientes que se ocasionarán.

Las obras de rehabilitación del asfalto de la TF-5, norte, y de la TF-1, sur, se llevarán a cabo en horario nocturno, de 22.00 horas a 06.00, para reducir las molestias, y de jueves a domingo, si bien también se trabajará algunos fines de semana.

Carlos Alonso presentó el inicio de las obras en rueda de prensa, acompañado de los directores insulares de Fomento, Miguel Becerra, y de Carreteras, Ofelia Manjón, y recordó el elevado número de vehículos que circulan por algunas zonas, ya que en el área de Alcampo, en el norte de la isla lo hacen cada día una media de 111.000, y en Guaza, en el sur, unos 85.000.

Explicaron que una de las novedades de los trabajos es que, debido a la los problemas que hay en la isla para conseguir áridos se utilizará una tecnología novedosa para lograr que el 25 por ciento del asfalto, el de los arcenes, será material reciclado.

Si bien la primera fase de las obras está en marcha, el martes próximo se comenzará a trabajar en la TF-5 con las máquinas en el asfalto del túnel 3 de Mayo, en la capital tinerfeña, y el domingo siguiente se iniciará en la calzada de la TF-1, sentido Fañabé-Aeropuerto del Sur.

La primera fase de la TF-5 se centrará en el tramo que une Santa Cruz y La Laguna con una inversión de 3.911.748 euros para que se terminen en verano las obras, mientras que la segunda, entre La Laguna y Los Realejos, se licitará en abril y la inversión será de 11.325.717 euros.

En cuanto a la TF-1, la primera fase se hará en el tramo que va del Aeropuerto del Sur a Fañabé con una inversión de 3.796.673 y una previsión de que los trabajos finalicen durante el verano, y la rehabilitación del asfalto del segundo tramo, entre Güímar y el aeródromo tendrá un presupuesto de 4.277.354 euros y se licitará en fechas próximas.

El dinero procede en parte de los fondos que la corporación insular recibe por las competencias transferidas, entre ellas carreteras, y también del Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan) y la previsión es terminar todas las obras durante el verano del próximo año.

En cuanto a la falta de áridos, Carlos Alonso ha manifestado que se puede importar, pero de ese modo aumentarían los costes y sería una acción que afectaría al medio ambiente, y ha añadido que se trata de ordenar la situación para resolver el problema.

Miguel Becerra ha explicado que la demanda de áridos en Tenerife está en torno a las 600.000 toneladas anuales, y ha recordado que en la isla hay una cantera legalizada y dos ámbitos extractivos, uno de ellos el Valle de Güímar, donde hay consenso social para dejar de hacerlo.

El director insular de Fomento ha señalado que se trata de una materia prima fundamental, ya que el hormigón que se precisa para carreteras, hospitales y escuelas se hace a partir de cemento y áridos.

La cantera que hay en Tenerife trabaja prácticamente las veinticuatro horas del día y se dedica casi únicamente al puerto de Granadilla, ha indicado Miguel Becerra, quien ha añadido que ahora, con la reactivación de la economía y de las obras pública se precisará más árido.

Miguel Becerra ha señalado que se trata de llamar la atención acerca de que hay un problema y hay que pensar en solucionarlo, y ha asegurado que no se trata de abrir más canteras pero tampoco de que se hagan "picoteos de forma desorganizada", por lo que ha abogado por establecer ámbitos regulados de extracción.

Carlos Alonso ha reconocido que hay obras que producen áridos, como la del túnel de Erjos, y que también se reciclará material, pero destacó que sería razonable no depender de la importación de ese material.

Ha señalado el presidente del Cabildo de Tenerife que desde la corporación insular se analiza el potencial del árido que se puede conseguir del lavado de barrancos y también se analizan los ámbitos que se pueden utilizar para obtenerlo, dentro del Plan Insular de Ordenación del Territorio (PIOT).