Las obras de adecuación al reglamento técnico-sanitario de la piscina municipal Acidalio Lorenzo podrán comenzar el próximo mes de mayo y se prolongarán durante cinco meses, con el objetivo de actualizar y mejorar las instalaciones para su uso ciudadano y deportivo.

La Junta de Gobierno acordó el pasado lunes la adjudicación definitiva de las obras, que suponen una reforma de gran alcance en los dos vasos existentes. Se ha decidido acometer en primera instancia el de 50 metros, de mayor impacto tanto por su uso y capacidad, como por la cantidad de mejoras que conllevará.

Una vez concluyan las reformas proyectadas, el vaso de la piscina de 50 metros verá ampliadas sus dimensiones, pasando a contar con 21 metros de ancho, divididos en ocho calles de dos y medio cada una. También se incluye la mejora de la iluminación, nueva pavimentación y la instalación de una barandilla que impide el acceso de las personas que no sean usuarias.

La instalación se adecuará al reglamento sanitario de piscinas de uso colectivo de Canarias, principalmente en cuanto al sistema de desbordamiento, recirculación y retorno del agua y número de duchas. Además, se ajustará a la normativa del Consejo Superior de Deportes para competición.

Según la normativa sobre accesibilidad, alguna entrada al vaso dispondrá de grúa y escaleras adaptadas.

Ubicada en la avenida Benito Pérez Armas, la piscina municipal Acidalio Lorenzo fue inaugurada en 1964.