"Ya estamos más que cansados, diríamos que agotados, de reclamar que limpien y mantengan en condiciones nuestros senderos sin obtener una respuesta concreta. Pensamos que debe pasar por un plan estructurado y que puedan desarrollar, al menos parte, de los muchos parados que, por desgracia, hay en la zona. Nos siguen vendiendo las bondades de la declaración de Reserva de la Biosfera y de momento no las vemos por ninguna parte". Así se manifestó un portavoz de colectivos vecinales del interior del macizo, en concreto de algunos de los barrios que pertenecen al municipio de Santa Cruz.

"Este es el sentir -apuntan- de la mayoría de la gente que vive en Taborno, Afur, Roque Negro, Casas de la Cumbre y Catalanes. Tanto asociaciones como vecinos individuales nos hemos reunido en varias ocasiones para tratar el asunto y hay un cierto sentimiento de frustración".

El macizo de Anaga fue declarado Reserva de la Biosfera por el Consejo Internacional de Coordinación del Programa MAB de la Unesco, reunido en París, el 9 de junio de 2015.

"Sabemos -reconocen- que por eso no van a cambiar las cosas de un día para otro. No es lógico ni posible. Pero es que siete meses después no sabemos nada en concreto y solo los rumores que se escuchan de cantidades de dinero por las posibles subvenciones inherentes a esa condición. Queremos saber a dónde van a destinarse esas inyecciones económicas y en qué se van a invertir".

Mientras tanto, por ejemplo, "ya son quince años de espera por la limpieza del camino entre Casa Carlos y Afur o el empate con Roque Negro que sale por la zona de La Porquera. Gracias a los vecinos y alguna aportación clave de fuera, lo redescubrimos pero no sabemos cuándo lo veremos limpio".

Y añaden: "Taborno está completamente abandonado y en Roque Negro se encuentra fatal el camino del barranco de la galería donde están los tradicionales lavaderos". Completan el panorama con "el paisaje de fauna exótica a retirar de una futura Reserva, como las cañas y el rabo de gato que están por todos lados"

Otra queja: "Sacan las cuadrillas de Gesplan, que trabajan muy bien, dos o tres veces al año pero será para justificar el presupuesto. Limpian lo más transitable, pero deberían permanecer fijas. Estamos contentos con Gesplan, pero no entendemos por qué tienen que dejarlo al poco tiempo de empezar. Hace falta una labor mucho más continua".

Al margen ya de los senderos, estos grupos trabajan "en busca de la unión de los vecinos", fundamental en una zona de poblamiento muy dispersa. Es el sentido de una reciente excursión al sur de la Islas o del acto para los mayores organizado en Afur el mes pasado por Ansina, un "ejemplo palpable de que hay algunas cosas que funcionan muy bien, como la entidad del Cabildo".

También van a potenciar la idea de celebrar algún acto de Carnaval en el caserío de Taborno "donde era tradicional hacerlo".

Todo sea por acabar con siglos de aislamiento en medio de un paisaje único y maravilloso, pero donde "también vivimos personas que necesitamos equipamientos y servicios", concluyeron.

Aún sin Consejo Rector

Desde el Ayuntamiento de Santa Cruz, en cuyos límites se incluyen las tres cuartas partes de la Reserva, aclaran que la limpieza y el mantenimiento de los senderos no son de su competencia, aunque todo está a expensas del Consejo Rector en el que estarán incluidas las cuatro administraciones implicadas: el Cabildo y los ayuntamientos de Santa Cruz, La Laguna y Tegueste. La última reunión fue el pasado septiembre para impulsar la creación de este órgano, encargado de coordinar la gestión de los aspectos medioambientales y del desarrollo socioeconómico en el ámbito de la Reserva. Hay ya un borrador, pero se hace necesario actualizar el Plan Rector del Parque Rural de Anaga. Por ahora no se ha constituido.