El concejal de Sí se Puede en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife Pedro Fernández Arcila ha asegurado hoy que la Empresa Municipal de Aguas SA (Emmasa) ha dejado de cobrar al año unos 600.000 euros por un agua que entregaba a Balsas de Tenerife (Balten) y que esta empresa vendía en el sur de la isla.

Pedro Fernández Arcila pide explicaciones al concejal de Servicios Públicos del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, Dámaso Arteaga, y, en un comunicado explica que se trata de agua depurada que procede de la estación depuradora de aguas residuales del barrio de Buenos Aires.

Según el concejal de Sí se Puede, esa práctica es un "ejemplo más de las políticas clientelares que se viven a diario no solo entre el Ayuntamiento y Emmasa, sino entre la corporación municipal y el Cabildo de Tenerife, propietario de la empresa Balten".

Señala Pedro Fernández Arcila que si "son ciertos los datos de los técnicos municipales, que dicen que se han dejado de cobrar por este concepto unos 600.000 euros anuales, estamos ante un caso de trato de privilegio que no parece tener justificación alguna y que consideramos inadmisible".

Comenta que con esa cantidad de dinero se aminorarían los costes de la depuración, lo cual repercutiría en las tarifas que pagan los ciudadanos de la capital tinerfeña.