El Cabildo de Tenerife, a través de la Sociedad Insular para la Promoción de Personas con Discapacidad (Sinpromi) y el Instituto Tecnológico de Energías Renovables (ITER), junto al Grupo de Neuroquímica y Neuroimagen, trabajan en el desarrollo de proyectos tecnológicos que den respuesta a las necesidades de las personas con discapacidad.

La consejera insular de Acción Social en funciones, Cristina Valido, valoró esta colaboración entre la universidad y las empresas cuyo objetivo es la mejora de la calidad de vida de las personas con discapacidad. "Acercar el uso de las tecnologías a estas personas, propiciando nuevas habilidades, facilita su inclusión social y laboral, objetivo prioritario del Cabildo", señaló.

Como primer paso, los tres organismos trabajan en dos proyectos que relacionan la tecnología de las comunicaciones con el autismo. En concreto, están preparando un sistema de control parental de tabletas para personas con esta discapacidad con el fin de controlar los contenidos de acceso que puedan perjudicarles. El otro proyecto consiste en un sistema tecnológico que servirá para diagnosticar a través de la mirada si una persona padece autismo.

Las dos iniciativas en las que se va a trabajar relacionan la tecnología con el autismo

Antes de la presentación de los proyectos, la Asociación de Padres de Personas con Autismo de Tenerife (Apanate) será quien teste la idoneidad de ambos sistemas.

"La tecnología crece a un ritmo vertiginoso, pero aún es difícil lograr que atienda las necesidades de las personas con discapacidad, esto es, que sean accesibles a todos", apuntan desde el Cabildo, y añaden que a esto se suma el elevado coste de la misma, de ahí que con este acuerdo de colaboración se permite abaratar costes que se requieren.