La estación de reciclado de materiales de construcción y derribo, comúnmente denominada "machacadora", emplazada en Camino Gonzailánez, parcela 191 del Polígono 12 de Güímar en suelo categorizado como rústico de protección agrícola intensivo, sigue en activo careciendo de la correspondiente y preceptiva licencia municipal, a pesar de que de su colocación y actividad tienen conocimiento todos los organismos y administraciones competentes, desde el ayuntamiento hasta el Gobierno de Canarias.

Llama la atención el papel de la Agencia de Protección del Medio Urbano y Natural (Apmun), cuya directora ejecutiva emitió, tras dar cobertura a la industria, una resolución el 25 de julio pasado constatando "la ilegalidad de las actuaciones consistentes en la instalación de la planta de RCDs y acopio de áridos y hormigón asociados a ella (...), confirmando que las mismas son ilegalizables".

De hecho, la Apmun ordena el restablecimiento de la legalidad urbanística a la entidad titular de la actividad, así como al propietario de la parcela. Para ello le otorga dos meses de plazo máximo, debiendo presentar el proyecto preceptivo debidamente cumplimentado y visado.

La instalación de la "machacadora" comenzó en el año 2015 y el pasado 24 de octubre se produjo la penúltima comparecencia ante la propia Apmun de un vecino afectado por la actividad de esta industria solicitando ser tenido en cuenta en el expediente como parte personada y afectada.

Desde junio de 2016, el Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria tiene constancia de esta situación puesto que, estando en embrión (casi) la industria de referencia, desde el entorno de su emplazamiento también se comunicó la proximidad de la misma a viviendas y a un hotel rural. "Es lamentable que se haya producido en Güímar el mayor atentado medioambiental de toda Canarias con la extracción de áridos y ahora lo poco que queda, al parecer, también se quiere deteriorar".