La Junta Local de Seguridad de Adeje sirvió ayer para que el ayuntamiento planteara a la delegada del Gobierno, Elena Máñez, y a mandos de la Guardia Civil y Policía Nacional la necesidad de coordinar y optimizar recursos para atender "problemas emergentes", como el importante número de viviendas ocupadas, el mal uso del alquiler vacacional a nivel delictivo y los problemas que generan clubes de consumo de marihuana. Al menos, esos fueron los asuntos que el alcalde, José Miguel Rodríguez Fraga, reconoció a los medios de comunicación.
El regidor dijo que "son situaciones nuevas" y, por tanto, "estamos analizando" las situaciones "que generan". Con respecto al alquiler vacacional irregular, dijo que "nos encontramos, a veces, con situaciones que rozan el delito o son delito realmente". Cabe recordar que en agosto pasado, policías locales de Adeje y agentes de la Policía Nacional localizaron un chalé de la urbanización El Madroñal (cerca de Miraverde), donde un ciudadano ruso que alquiló el inmueble lo había subdividido para crear 33 habitaciones para turistas, a la vez que puso 10 casetas en el jardín trasero. Rodríguez Fraga también se refirió al importante número de casas ocupadas, con el objetivo de dar una respuesta al problema dentro de la legalidad.
En Adeje funcionan media docena de centros de consumo de cannabis. El alcalde señaló que dichos clubes "son legales", pero hay que ver también qué efectos producen en el entorno donde están situados y sobre la población más joven, además de "cómo funcionan y cómo podemos controlarlos".
El presidente de la Corporación adejera aclaró que, además de respetar el derecho de esas personas consumidoras, se debe analizar las "situaciones derivadas que surgen de ahí", que generan "alarma social y riesgo para la población más sensible". Fraga comentó que en algunos centros "existen movimientos con los que hay que tener cuidado". A finales de octubre, la Policía Nacional informó de que en un club cannábico de Adeje detuvo a tres personas por la venta de marihuana. Los agentes intervinieron 2.500 gramos de dicha sustancia.
La delegada del Gobierno, Elena Mánez, reconoció que Costa Adeje es un destino seguro, "pero hay que seguir trabajando para que los índices de seguridad cada vez sean mejores". Comentó que las últimas estadísticas demuestran que "los delitos que generan más inquietud en los ciudadanos están bajando" y, además, las fuerzas de seguridad "hay realizado operaciones muy importantes". Máñez manifestó que "estamos avanzando con el ayuntamiento para poner en marcha" el Servicio de Atención al Turista Extranjero (Sate), así como en "el mejor modelo que podemos desarrollar". Apuntó que es consciente de la demanda de recursos humanos y medios materiales para la Policía Nacional y la Guardia Civil, pero matizó que el Gobierno estatal trabaja para recuperar "lo público" y las 25.000 plazas de agentes perdidas en siete años.