Francisco Niño aspira a la Alcaldía de Arona consciente de que "seré consecuente con lo que haga, no con lo que otros me digan que debo hacer. Esta vez tengo las manos libres para tomar decisiones". Liderando Europeos por Canarias, del que es presidente de su comité local, quien fuera el último regidor aronero con CC está "convencido de que nada de aquello me pasará factura. Nunca hice el mal a nadie, siempre he querido ayudar al prójimo, a pesar de mis pesares".

Defiende que "tengo amigos en Coalición Canaria y en todos los partidos, me llevo bien con todos", si bien la percepción que actualmente tiene de la que fue su formación política le lleva a decir que "igual que cuando salí de él, en el momento previo a las elecciones, entiendo ahora que no me veo ahí sino tratando de buscar lo mejor del municipio desde donde estoy".

Llegó a la actividad política como número dos de la última candidatura que lideró el condenado José Alberto González Reverón, en 2011, a quien sustituyó como alcalde el 10 de diciembre de 2012. Su experiencia le permite afirmar que espera contar con un equipo "lo más profesional posible" e integrarlo con el grupo de técnicos municipales "para garantizar una gestión mejor".

En su análisis de Arona, detecta "infraestructuras obsoletas" y una situación en las Galletas "cuya reparación es de perogrullo", con "el desbloqueo del plan parcial El Mojón" como contrapunto y señalando Palm-Mar como "la joyita de esta corona", zona para la que reclama "accesibilidad al mar", apostando por crear el corredor que discurra desde Las Galletas a Palm-Mar y de aquí, a Los Cristianos. "Generará actividad económica y empleo".

Francisco Niño valora positivamente la gestión municipal actual en Turismo y en Servicios Sociales, "donde se sigue trabajando a destajo en un municipio de 160 nacionalidades, cuya convivencia no es fácil".

El candidato a la Alcaldía confesó que "en el fondo, José Julián Mena (el alcalde actual) me ha decepcionado". Explicó que "siempre le ofrecí mi colaboración, especialmente para orientarle en los primeros meses, pero el alcalde es difícil de localizar, a veces".

Niño, archiconocido pediatra en el municipio, tiene claro que "el ciudadano quiere vivir cómodo, seguro y con los servicios a su alcance". Retorna a la política "para que algunos se desengañen -y yo, también- de si realmente tengo o no ese carisma que me atribuyen".