El Ayuntamiento de San Miguel de Abona cerro 2016 con un superávit de 3.466.919,06 euros, lo que permitirá mejorar los servicios, invertir para dinamizar la actividad económica y el empleo y sanear las cuentas públicas.

Las cifras favorecieron un remanente de Tesorería que aumentó hasta 5.408.760 euros, lo cual permitirá afrontar gastos no presupuestarios, entre otros.

La recaudación alcanzó el 92,64% sobre los derechos reconocidos y el grado de ejecución de los gastos fue el 96% sobre las obligaciones reconocidas. El límite de deuda está en el 25% y el periodo medio de pago es de 24 días.

El alcalde, Arturo González, señala que "estas cifras son alentadoras y permitirán que se puedan acometer nuevas actuaciones que incidan en un mayor desarrollo del municipio".