Hoteles de alta calidad junto a un parque verde de 90.000 metros cuadrados. Ese es el potencial, todavía sin desarrollar, que atesora el Plan Parcial de El Mojón, en Arona, municipio que recibe miles de visitantes al año, pero que parece haber perdido el tren del turismo de poder adquisitivo medio-alto. Inversiones Marylanza S.L., que ya cuenta con un hotel en la localidad, Marylanza Suites & Spa, ha dado el primer paso y ha solicitado al Ayuntamiento la licencia para construir un establecimiento de cinco estrellas con el que cualificar la oferta de la localidad y atraer un nuevo tipo de cliente: Tenerife Blue Village.

El complejo turístico que proyecta este grupo empresarial -con 20 años de experiencia e integrado por Lanzateide Comercial y la familia Marichal- se levantará sobre una parcela de 15.000 m2 situada en Los Cristianos, constará de 121 habitaciones distribuidas en dos plantas, dispondrá de tres piscinas y otros tantos restaurantes. Además, contempla un spa, cafeterías, sala de convenciones y salón de espectáculos. La inversión superará los 20 millones de euros y la creación de 150 puestos de trabajo directos, además de otros 350 durante su construcción.

Los datos los aporta el consejero delegado de Inversiones Marylanza, Jorge Marichal, quien destaca que el establecimiento se sitúa junto a una gran parcela en la que se ubicará un gran parque para uso y disfrute de los vecinos y visitantes, así como parcelas de uso cultural, de ocio y comercial.

"Debemos apostar por el turismo de calidad. Arona tiene que posicionarse no solo en el segmento de apartamentos y cuatro estrellas, sino también en el de cinco, como hizo en su día Costa Adeje", expone Marichal. El éxito del núcleo turístico del municipio vecino, con una tasa de paro seis puntos inferior y una oferta alojativa muy cualificada, puede señalar el camino por el que debe transitar Arona.

El de Inversiones Marylanza es el primer proyecto hotelero dentro del Plan Parcial de El Mojón para el que se ha pedido licencia en el Ayuntamiento de Arona, pero, según Marichal, hay otros empresarios interesados que solo esperan a que se desbloqueen las trabas burocráticas que hasta ahora impiden el desarrollo de este ámbito. Se trata, según el empresario, de cinco parcelas susceptibles de albergar "seis o siete productos de máxima calidad, especializados y dirigidos a una nueva clientela", que no representarán competencia para los ya ubicados. Este "polo de desarrollo" es "necesario para Arona y para el sur de la Isla", afirma. "Es el momento: hay demanda, hay paro, hay ganas y hay financiación", añade.

El hotel -diseñado por el arquitecto Carlo Garrone Merlo, del Taller de Arquitectura Domus- tendrá elementos novedosos, como habitaciones "swim up" -piscinas privadas a las que se accede directamente desde la terraza de cada unidad alojativa- y habitaciones (standar, superiores y suites) espaciosas -de entre 35 y 55 m2-, dos aspectos que refuerzan el concepto de alta calidad en el que quieren centrarse sus promotores. Además, incluirá una especializada oferta gastronómica, comprometida con el producto local, y las últimas novedades en sostenibilidad y eficiencia energética. Su inauguración se prevé para el invierno de 2018.