La Confederación Española de Policía (CEP) denuncia lo que percibe como intento de acoso hacia varios policías del Grupo de Seguridad Privada de la Comisaría Sur de Tenerife por parte de un empresario que está recurriendo a los órganos judiciales para denunciar reiteradamente hechos sobre los que se viene decretando el archivo y que, pese a ello, ahora han sido empleados nuevamente para su difusión pública, "tratando de arrojar una sensación incierta de irregularidades en la actuación policial impecable de los compañeros".

Dicho empresario fue arrestado por intrusismo profesional, falsificación, amenazas, contra los trabajadores, contra la seguridad social e insolvencia punible, según el CEP. En 2011, ya denunció los mismos hechos, siendo desestimados y archivados, señala el sindicato.

Este mismo empresario, en diciembre de 2011, interpuso una denuncia en el Juzgado de Instrucción número 2 de Arona por idénticos hechos y, tras la investigación, se dictó auto de sobreseimiento y archivo, al no apreciarse indicios de criminalidad en mayo de 2012, en palabras de la organización sindical. Y el Juzgado de Instrucción número 4 de Santa Cruz instruyó diligencias sobre los mismos hechos, quedando desestimados. El CEP apunta que "los acosos a los policías van más allá y se ha ampliado la campaña mediante una denuncia al Defensor del Pueblo (agosto de 2014) y a la Fiscalía Provincial (septiembre 2014), quedando esta última desestimada igualmente, tras la remisión de las alegaciones.

Tras una información publicada recientemente sobre que este empresario había interpuesto una querella contra los policías, los afectados se personaron en el Juzgado de Instrucción número 1 de Arona, donde una funcionaria les informó de que no se estaban tramitando diligencias.

Según el CEP, todo el material intervenido en la operación de 2011 fue remitido y referenciado en diligencias policiales; además, los locales a los que se refiere se encontraban abiertos al público y el registro se realizó en zona pública, como quedó demostrado en las actas de declaración y entrega voluntaria de efectos, firmadas por los trabajadores que estaban en los locales denunciados.

Por todo ello, los policías interpusieron recientemente una querella contra este empresario por denuncia falsa y simulación de delito, que ha dado lugar a la apertura de diligencias previas, que se encuentran actualmente en aras de su elevación a juicio oral. Desde el CEP muestran su apoyo a "unos compañeros que han tenido una actuación impecable en lo profesional y que están teniendo que soportar un rosario de denuncias, todas ellas archivadas, de una persona que quizás pretenda amedrentarlos".