Como resultado de las labores de rescate que están llevando a cabo efectivos de los Grupos Especiales de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS) en el embalse de Iznájar (Córdoba), con motivo del accidente de un autogiro ocurrido el pasado 19 de febrero, ha sido localizada la nave y también el cuerpo sin vida del piloto de la misma en el interior del embalse.

Según ha informado la Benemérita, las labores de rescate, en cualquier caso, "se prolongaran durante varias horas" en el citado embalse, donde han sido hallados el piloto y el helicóptero tras siete días de búsqueda y usando para ello, desde este domingo, una cámara hiperbárica, perteneciente a la Unidad de Actividades Subacuáticas del Servicio Marítimo de la Guardia Civil.

Se trata de un dispositivo que ayuda a prevenir accidentes de los buceadores de los GEAS, como consecuencia de las "duras condiciones" de presión y profundidad en las que están trabajando. También permite recortar los plazos de recuperación de los buceadores y aumentar, en consecuencia, los minutos de inmersión dedicados al rescate.

La labor de los buceadores de los GEAS que trabajan en el embalse de Iznájar se ha ido reforzando con nuevos especialistas procedentes de las unidades de Sevilla, Málaga y, desde la tarde del pasado viernes, con efectivos de Almería.

La Junta de Andalucía activó al Grupo de Intervención Psicológica en Emergencias y Desastres (Giped) para la atención a la familia del varón que pilotaba el helicóptero que cayó al pantano, donde los efectivos se afanan por recuperarlo.

De este modo, prosiguen los trabajos para rescatar al piloto, después de que la pasada semana hayan estado en la zona el director general de Emergencias y Protección Civil de la Junta, Agustín Muñoz, y el alcalde de la localidad, Lope Ruiz, para conocer la labor de los operativos activados por el 112 Andalucía, como la Guardia Civil, la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias (EPES) 061, Bomberos de Lucena y Puente Genil y Policía Local, además de que se avisara en su momento al Centro de Control de Tránsito Aéreo y el Centro de Coordinación y Rescate.

En concreto, el helicóptero tenía un solo ocupante que realizaba un vuelo particular y, según las primeras hipótesis, colisionó contra unos cables de alta tensión antes de caer al pantano, según confirmaron a Europa Press fuentes municipales y del servicio de Emergencias 112 Andalucía.

El accidente se produjo en la mañana del martes 19 de febrero, cuando sobre las 11,21 horas se atendía en el teléfono de Emergencias 112 varios avisos de testigos que informaban de la caída del helicóptero en la zona del embalse de Iznájar y, según los primeros datos aportados por la Benemérita, se trata de un helicóptero que había salido del aeródromo de Antequera (Málaga).