La Fiscalía de Santa Cruz de Tenerife pide un total de 25 años de prisión y el pago de multas que ascienden a 141.000 euros a nueve personas de La Palma acusadas de tráfico de drogas. El juicio se ha venido celebrando durante los últimos días en la Audiencia Provincial y está previsto que se reinicie el próximo 11 de febrero hasta el 13 del mismo mes. Los imputados son de nacionalidad española, excepto uno que es de Bolivia y de todos ellos, tres se encuentran en situación de prisión provisional y el resto ha pagado fianzas que oscilan entre los 1.000 y 3.000 euros.

Los hechos objeto del juicio tienen su inicio en el mes de febrero de 2017 cuando el equipo de investigación de la Guardia Civil de Los Llanos de Aridane comenzó una operación para desmantelar puntos de venta de estupefacientes que se habían localizado en el Oeste de la Isla.

Las defensas de los imputados han pedido la anulación de las escuchas telefónicas, única prueba con la que cuenta la acusación. Por ello, en caso de que se aceptaran sus tesis quedaría desmantelada toda la causa. Los abogados de los acusados también mantienen que las sustancias incautadas eran para consumo propio y la prueba es su escasa entidad.

La Fiscalía sostiene que uno de los detenidos, L.M.A.R. se venía dedicando a estas labores en su domicilio en Los Llanos de Aridane, a donde acudían los consumidores. En el mes de marzo, durante un control en el puerto de Santa Cruz de La Palma, fue detenido junto a W.F.A.S. a su llegada en un ferry procedente de Los Cristianos. En el interior del vehículo se encontró algo más de 45 gramos de cocaína con una riqueza de 61,2% y en el domicilio del primero se hallaron 20 gramos de anfetamina, 166 de marihuana, básculas digitales y 1.110 euros en metálico. De haberse vendido la cocaína el beneficio obtenido hubiese alcanzado casi 2.700 euros y la anfetamina, alrededor de 1.106.

Las investigaciones determinaron que R.Y.R.V era uno de los suministradores y a la vez también vendía heroína y cocaína en esta parte de la Isla que introducía en la Isla a través de los acusados S.M.T. y A.R.F. desde Gran Canaria. A raíz de que se vigilara la casa de R.Y.R.V. se procedió a la detención de todos ellos. En el caso de S.M.T. se halló en su ropa interior un envoltorio con 44 gramos de heroína con una pureza del 12,3% y de las pruebas radiológicas se verificó que los otros dos llevaban dentro del cuerpo sustancias estupefacientes. En concreto, el primero portaba tres cilindros de cocaína con un peso de 72,4 gramos el primero, 52,7 el segundo y 30,1 el tercero. En el caso de A.R.F., guardaba dos cilindros con 42,3 gramos de cocaína y 55 de heroína que, de haberse vendido en el mercado negro, habrían supuesto ganancias por valor de 12.000 euros.

Las investigaciones también identificaron a otro acusado, Y.F.H., quien operaba en colaboración con A. R. M. y B. R. M., tanto en lo que se refiere a introducir la droga en la Isla como a su posterior distribución. El primero fue detenido a su llegada en barco y se le encontraron 19,2 gramos de cocaína con una pureza del 71,4%, cuyo valor hubiese ascendido a 142.000 euros. En El Paso se detuvo a J.C.G.S. y en su vivienda se encontró medio gramo de cocaína y en su coche otros 10,3 de esta sustancia y 0,19 de MDMA, que de haberse vendido habría supuesto ganancias por 652 euros.

El Ministerio Público sostiene que todos ellos son autores de un delito contra la salud pública y estima que se les deben aplicar penas que oscilan entre un máximo de cinco años y un mínimo de tres y medio y multas que van de los 52.000 euros a los 1.800.