La representación legal de Sergio Ramón A. R., acusado de matar a su yerno en los alrededores del Hospital de La Candelaria, se mostró satisfecha con la condena de diez años y tres meses impuesta y no piensa presentar un recurso, aunque es posible que lo hagan la acusación particular y la Fiscalía. Y ello es así dado que ambos solicitaban 15 años, frente a los 25 que inicialmente llegó a pedir el abogado de los padres del fallecido. La indemnización que recibirán estos últimos ha quedado cifrada en 150.000 euros. A finales de diciembre, un Jurado Popular determinó que Sergio Ramón era culpable de homicidio con distintos agravantes, como el de parentesco.

El enfrentamiento que desencadenó la muerte tuvo lugar en junio de 2017, cuando el imputado asestó una puñalada mortal al joven que mantenía una relación sentimental con su hija. El Tribunal Popular descartó aplicar atenuantes como los de obcecación, arrebato o arrepentimiento planteados por la defensa.

El Jurado estima que no se dieron las condiciones para fijar una condena por asesinato en cuanto que de las imágenes aportadas por la Policía no se puede determinar que concurra la alevosía; entre otras razones porque el ataque se produjo de frente y no de forma sorpresiva. El Jurado fijó que estaba en plenas condiciones mentales y no actuó bebido, drogado o bajo el síndrome de abstinencia.