La Fiscalía del área de Gijón ha solicitado cinco años y medio de prisión para una acusada de maltratar física y psíquicamente a su pareja, septuagenario y con Alzheimer, y de apropiarse de su dinero. La vista oral está señalada este miércoles en la Sección Octava de la Audiencia Provincial, con sede en Gijón, a las 10.30 horas.

El Ministerio Fiscal sostiene que, aproximadamente desde primeros del año 2015, la acusada mantenía una relación sentimental con la víctima, nacido en 1942. Ambos residieron juntos Gijón hasta el 27 de julio de 2017.

El hombre tenía mermadas sus facultades por deterioro psicofísico y, aprovechando esta circunstancia, la acusada "ejerció frecuentemente violencia psíquica y verbal contra él y gestionó su patrimonio, haciendo suyo su dinero", según ha informado la Fiscalía en nota de prensa.

En concreto, la acusada se apropió del dinero que tenía la víctima, un total de 76.313, vaciando la cuenta por completo. La acusada, entre otras operaciones, llegó a utilizar el cajero en el mes de junio para disponer de un total de 3.000 euros y, al mes siguiente, gastó en una tienda de deportes la suma de 2.000 euros; además, sacó del cajero 600 euros. Igualmente adquirió un coche por importe de 23.800 euros, que también cargó a esa cuenta.

La acusada llegó a pedir un préstamo para un negocio de su hija de 10.000 euros, asumiendo el pago del mismo la víctima. El hombre llegó a tener siete operaciones de crédito impagadas, y fue incluido en la lista de morosos, siendo embargada su pensión.

Por otro lado, el 28 julio de 2017, la víctima, con apoyo de sus hijos, denunció a la acusada por dirigirle expresiones de menosprecio. Una semana antes, la acusada le agredió, propinándole puñetazos en la cabeza, sin que acudiera a recibir asistencia médica por temor a la reacción de la mujer.

Igualmente le limitaba el acceso a la comida y le obligaba a dormir en una colchoneta en el suelo, aproximadamente desde mayo de 2017, fecha en la que también le retiró las llaves de la vivienda y le repetía que como dijera algo le iba a romper la cabeza o matarle. Según la Fiscalía, la víctima no tenía capacidad para consentir o tolerar los mencionados actos realizados a su nombre.

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de maltrato habitual y de un delito de apropiación indebida.