La Policía de Pakistán arrestó el viernes a un hombre por el asesinato de su hija, su yerno y sus dos nietos en la localidad de Hafizabad, situada en la provincia de Punyab (sureste), en lo que ha sido descrito como un ''crimen de honor''.

Las autoridades han afirmado este sábado que el hombre, identificado como Gulzar Ahmed, mató a su hija y su familia debido a que se casó en contra de su voluntad hace cerca de cuatro años, según ha recogido la cadena de televisión paquistaní Geo TV.

Más de 500 personas, casi todas mujeres, mueren cada año en Pakistán por casos similares a este, normalmente a manos de sus familias como castigo por "avergonzar" a su familiares y su comunidad.

Pakistán enmendó su Código Criminal en 2005 para evitar que los responsables de ''crímenes de honor'' escaparan a la justicia perdonándose a sí mismos como familiares de la víctima. Sin embargo, depende de cada juez si son condenados en caso de que otros familiares le concedan el perdón.

Los casos suelen ser determinados por yirgas --asambleas que reúnen a los notables y a los líderes locales-- que suelen conformarse en áreas rurales y conservadoras para lidiar con disputas locales, especialmente con aquellas que se producen entre familias pobres. Aunque operan de forma paralela a la legislación paquistaní, sus decisiones a veces son generalmente respetadas por las autoridades.

El documental paquistaní ''Una chica en el río: El precio del perdón'', de la directora Sharmin Obaid Chinoy, basado en los ''crímenes de honor'', se hizo en 2016 con el Oscar al mejor cortometraje documental.