La Guardia Civil investiga a una persona como presunta autora de un delito de estafa mediante el timo de la tablet en comercios de tipo bazar y electrónica en Puerto de Mogán y Puerto Rico (Mogán), en el sur de Gran Canaria.

La investigación se inició a principios del pasado mes de junio, cuando una turista holandesa informó de que había sido víctima por parte de un comercio de electrónica mediante el sistema del timo de la tablet y que la estafa ascendía a unos 2.000 euros, informa la Guardia Civil en un comunicado.

En esta ocasión, la perjudicada accedió a un comercio tipo bazar sito en la localidad de Puerto de Mogán, donde adquirió una tablet y varios complementos por un importe total de 50 euros en efectivo.

Una vez formalizada la venta, los vendedores, le ofrecieron suscribirse a un servicio especial con el que tendría acceso a Internet, llamadas gratuitas, videollamadas y más de 200 canales de televisión gratuitos, por un importe mensual de 12 euros, si bien el pago inicial debía efectuarse obligatoriamente con tarjeta de crédito.

Una vez efectuado el pago, los vendedores le dijeron que debía apagar su teléfono móvil al menos durante 12 horas para permitir la instalación de ese sistema, todo ello al objeto de eludir la comprobación de los cargos mediante acceso a Internet.

Días más tarde, cuando regresaba a su país de origen, la denunciante se percató de que le habían efectuado tres cargos no autorizados en su tarjeta por un importe total de 1.979 euros, desde comercios donde no había efectuado la compra y en los que ni siquiera había estado, por lo que acudió al establecimiento antes de su marcha al aeropuerto de Gran Canaria para presentar una queja y solicitar la devolución del dinero, a lo que los vendedores hicieron caso omiso.

Tras la denuncia, a localización del medio de pago fue extremadamente complicada, puesto que no existían registros del uso de la tarjeta de la denunciante en las empresas que regulan los sistemas de pago telemáticos.

Finalmente, y tras intensas gestiones, se pudo identificar la empresa a través de los que se realizaron dos de los cargos con tarjeta, siendo esta una entidad bancaria con sede en Inglaterra, la cual asocia una cuenta bancaria online a cada terminal TPV para poder disponer del dinero de las operaciones con tarjeta, si bien todo ello se realiza en el extranjero.

Dicha entidad bancaria identificó como titular de los TPV a dos personas, las cuales trabajan como simples dependientes en comercios vinculados a dos empresas, teniendo relación directa con los comercios vinculados a las estafas.

Con toda la información obtenida, el pasado 10 de agosto, se imputó calidad de investigado a uno de los titulares de los TPV utilizados, D.C.K., de 36 años, y no se descartan otras imputaciones.