El juzgado ha ordenado prisión provisional, comunicada y sin fianza para el hombre detenido el pasado lunes acusado de haber incendiado en Madrid la vivienda de su expareja, sobre la que tenía vigente una orden de alejamiento a pesar de la cual le escribió amenazándola con quemar su casa.

Según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), el titular del Juzgado Especializado en Violencia sobre la Mujer número 2, que estaba ayer en funciones de guardia, decretó el ingreso en prisión del presunto agresor.

También activó de oficio una orden de protección sobre la mujer que estará en vigor durante todo el procedimiento judicial.

El magistrado le acusa de un delito de amenazas contemplado en el artículo 169 del Código Penal y de otro de quebrantamiento de medida cautelar previsto en el artículo 468 del Código Penal.

Este órgano se ha inhibido a continuación en el Juzgado Especializado en Violencia sobre la Mujer número 1, que es el que inició las diligencias.

La Policía Municipal de Madrid detuvo el lunes en el distrito madrileño de Puente de Vallecas a este hombre, de 37 años y nacionalidad rumana, tras comprobar que había prendido fuego a la vivienda de su expareja, de 39 años y origen ecuatoriano.

Horas antes del siniestro, el detenido le había enviado mensajes desde el móvil en los que la amenazaba de muerte y con quemar su casa, a pesar de tener una orden de alejamiento.

La tarde del pasado domingo, día 11, la mujer había salido de casa y cuando regresó sobre las 21.45 horas la vivienda estaba en llamas y los bomberos del Ayuntamiento de Madrid trataban de extinguir el fuego.

Terminadas las tareas de extinción, agentes de la Policía Municipal comprobaron que la cerradura de la puerta de la vivienda no había sido forzada y que el incendio se había originado en una habitación.

La mujer contó a los agentes que el causante del incendio podría ser su expareja, les enseñó los mensajes que le había remitido esa misma tarde en los que amenazaba con prender fuego a la vivienda y les indicó que dormía en la calle y en qué lugar.

Sobre la una de la madrugada del lunes los policías le localizaron y le arrestaron, aunque el hombre negó todas las acusaciones.

Sin embargo los agentes se incautaron de un teléfono móvil con los mensajes amenazantes y de una copia de las llaves con las que supuestamente habría accedido a la vivienda.