Policías nacionales de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras de Madrid detuvieron a tres varones y dos mujeres por obligar a dos jóvenes nigerianas a ejercer la prostitución en Playa de las Américas.

La cabecilla del grupo fue apresada en Bilbao, mientras que tres hombres y otra mujer fueron arrestados en Tenerife. La operación fue desarrollada a finales de octubre.

Agentes de la Policía Nacional detectaron a las jóvenes subsaharianas y las derivaron a una ONG especializada en atención a víctimas de explotación sexual. Los funcionarios comenzaron una investigación para tratar de localizar a sus explotadores. Y finalmente se pudo desmantelar la organización citada.

La afectadas relataron que fueron captadas en su país de origen con engaños y sometidas a rituales de vudúpara convencerlas de que tanto ellas como sus familias serían víctimas de todo tipo de males, incluso la muerte, si incumplían su juramento.

Después iniciaron un largo viaje por carretera, que les llevó a atravesar Nigeria, Níger y Libia, según explicaron las afectadas, que también afirmaron que embarcaron en un cayuco y llegaron hasta Italia. En dicho país, un miembro de la banda contactó con ellas y las acompañó hasta España, proporcionándoles papeles falsos.

Las víctimas contaron que en este país les dijeron a qué iban a dedicarse hasta saldar por completo su deuda, que fue cifrada en 30.000 euros cada una.

Según la información recabada por los agentes, las jóvenes debían entregar semanalmente sus ingresos.

Desde la Policía Nacional informaron de que los acusados se aprovecharon de la "absoluta vulnerabilidad" de las víctimas, por su juventud, al estar indocumentadas y desconocer el idioma español. En las detenciones en Tenerife colaboraron policías de Extranjería y Fronteras de la Comisaría del Sur.