Los dos cisnes negros vistos en la costa de Gran Canaria han sido ya capturados y trasladados a una finca del Cabildo, puesto que se trata de animales de una especie ajena a Canarias, de procedencia australiana, que probablemente se escaparon o fueron liberados por su propietario.

El director del Centro de Recuperación de Fauna Salvaje del Cabildo de Gran Canaria, Pascual Calabuig, ha explicado hoy a la prensa que se trata de dos ejemplares de Cygnus atratus, una especie de cisne exclusiva de Australia que no conviene dejar libre en ecosistemas tan sensibles como son los del archipiélago.

"Los animales silvestres de otros lugares no deberían empezar a ocupar más espacio en islas. Las especies introducidas generan problemas graves. Tenemos el ejemplo de las cotorras, que son argentinas. Están aquí porque alguien un día las soltó y hoy tenemos una auténtica invasión", ha enfatizado Calabuig.

Este experto en fauna silvestre cree que los dos cisnes negros probablemente pertenecen a alguien los tenía en una finca o en un estanque privado con las plumas cortadas para que no volaran. "Pero las plumas crecen" y los animales vuelven a volar, apunta.

Sin embargo, Calabuig ve algo extraño en este caso, ya que se trata de dos animales valiosos y resulta raro que nadie los haya reclamado aún, si lo ocurrido con ellos fue que se escaparon.