El acusado de delitos de estafa continuada haciéndose pasar por juez togado militar negó ayer ante la Audiencia de Las Palmas que simulara ser jurista y dijo ser empresario y mantener deudas con algunas personas, pero sin haber cometido delitos.

En la primera sesión del juicio que se celebra contra el acusado, Domingo Javier D.G., este negó haberse hecho pasar por comandante y agente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) para hacer negocios y apropiarse de "ingentes cantidades de dinero" con el engaño de que podía adquirir bienes en subastas judiciales o contratar servicios de abogados y procuradores. El acusado, que además es reincidente en el delito de estafa, según la Fiscalía, asegura que nunca ha participado en subastas judiciales ni de ningún tipo y que, desde que dejó el ejército en el año 2000 como cabo primero, ha sido agente inmobiliario, intermediario en otros negocios de compraventa y directivo de una empresa cuyos socios también figuran como víctimas del procesado. Dos de las primeras víctimas en declarar, de la veintena que figuran en el procedimiento, dijeron, sin embargo, que se les presentó como "el comandante Guillén" y como juez, aunque una de ellas, la propietaria del apartamento donde vivía, dijo que con el tiempo descubrió su "cuento" y que no quiere reclamarle nada de las rentas que le adeuda. La otra testigo sí reclama los desperfectos y rentas pendientes de un local en San Bartolomé de Tirajana.