El guarda rural del coto de caza de Los Catalanes denunció a un cazador que fue sorprendido en dicho paraje, con la intención de practicar dicha actividad, pero sin disponer de la autorización del titular de dicho espacio.

El hombre finalmente denunciado acudió durante la mañana del pasado lunes a dicho caserío de Anaga y aparcó su todoterreno en la zona de La Galería.

El guarda rural detectó que el citado varón soltó a tres perros de pluma (perdiceros).

Después, cogió su escopeta, la montó y, sin funda, empezó a recorrer el referido coto por la zona de adistramiento de perros.

Como ni tenía permiso del titular del coto ni estaba en posesión de su documento nacional de identidad, el guarda procedió a denunciar al mismo, a la vez que lo informó de que debía entregar la escopeta en el área de Intervención de Armas de la Guardia Civil.

Este último trámite se hizo efectivo en pasado viernes. Cabe recordar que el coto de caza de Los Catalanes está cerrado para la modalidad de perdiz con escopeta, debido a la escasez existente de dicha ave, según los datos que trascendieron ayer.