La Guardia Civil y la Agencia Estatal de Administración Tributaria, en una operación conjunta, detuvieron en Sevilla y Alcalá de Guadaíra a diez personas y desmantelaron una organización criminal dedicada a la distribución de bebidas alcohólicas que se apropiaba del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) que debían ingresar en las arcas públicas y cuyo montante evadido se aproxima a los 3.700.000 euros.

Según informó la Agencia Tributaria en un comunicado, la operación "Gorpros blanco" comenzó hace varios meses bajo la dirección del Juzgado de Instrucción número 2 de Marchena (Sevilla) a raíz de una investigación de un importante grupo criminal dedicado al tráfico de drogas.

Los agentes verificaron la existencia de una organización delictiva, vinculada con la anterior, dedicada a la comisión de un fraude millonario a Hacienda.

En el curso de esta operación, en la que se hicieron siete registros en diversas sociedades y domicilios de las provincias de Sevilla, Córdoba y Vigo, se puso de manifiesto una compleja estructura societaria que se utilizaba para evadir impuestos. La investigación fue llevada a cabo por agentes de la Guardia Civil y Funcionarios de Vigilancia Aduanera y de la Inspección Financiera de la Agencia Tributaria, mientras que los hechos ahora descubiertos podrían haber supuesto una defraudación fiscal en la cuota no ingresada, que se ha estimado por los investigadores en un monto superior a los 3.700.000 de euros. Las empresas implicadas venían operando en el sector de la distribución de las bebidas alcohólicas. El esquema del fraude, centrado en el IVA, consistía en adquirir las mercancías en un país de la Unión Europea, generalmente Holanda y Portugal, siendo introducidos en un depósito fiscal, sin IVA, para su venta posterior a empresas distribuidoras y minoristas con el IVA devengado. Para eludir el pago, se usaban empresas pantallas intermedias que simulaban operaciones comerciales dando una apariencia de normalidad.