El tribunal federal de apelaciones de Atlanta (Georgia) y la corte estatal de apelaciones pusieron hoy en suspenso la ejecución de un discapacitado mental, según anunció su abogado minutos antes de la hora programada para la inyección letal.

Warren Hill, condenado a muerte en 1990 por asesinar a otro recluso, ya estaba sedado cuando sus abogados obtuvieron la notificación de la corte de Atlanta que suspendía la ejecución, prevista para las 19:00 hora local (00:00 GMT del miércoles), según informó el diario Atlanta Journal-Constitution.

La suspensión se debió a motivos diferentes: en el caso del tribunal estatal, por dudas sobre si el tipo de inyección letal utilizada viola la ley de Georgia; y en el federal, por la reclamación de la defensa de que Hill es discapacitado mental, explicó al diario su abogado, Brian Kammer.

No está claro, según el rotativo, si las suspensiones se levantarán pronto o si detendrán la ejecución de Hill durante un largo periodo.

Hill está en el corredor de la muerte desde 1990 por haber matado a otro recluso en una prisión del suroeste de Georgia, donde cumplía una condena a cadena perpetua por el asesinato de su novia en 1985.

Sus abogados piden que se le exima de la ejecución debido a su coeficiente intelectual de 70, una petición a la que se ha sumado el expresidente estadounidense Jimmy Carter (1977-81) y su esposa, Rosalynn.

La pareja indicó hoy en un comunicado que ha renovado sus peticiones a la comisión encargada de la libertad condicional para que conmuten la sentencia de muerte de Hill.

Georgia es el único estado de EE.UU. que exige que los condenados a la pena capital demuestren sus retraso mental "sin dudas razonables", un estándar que los abogados denuncian como demasiado estricto.