La Policía Local de San Miguel de Abona imputó a cuatro jóvenes, de nacionalidad rumana y con domicilio en el Sur de Tenerife, que fueron sorprendidos cuando hurtaban productos en un supermercado ubicado en el polígono industrial de Las Chafiras.

Los hechos ocurrieron en el establecimiento de la cadena Lidl, cuando un vigilante detectó que varias personas introducían efectos en bolsos.

Ante dicha circunstancia, el trabajador decidió llamar a los agentes, que se desplazaron hasta el establecimiento e identificaron a dos hombres y otras tantas mujeres.

Tras revisar los bolsos, los funcionarios comprobaron que los rumanos habían sustraído diversos productos alimenticios, como muslos de pollo, carne y leche, así como una cortadora de pelo.

Forrados por dentro

Además, los agentes certificaron que los bolsos utilizados por los implicados estaban forrados interiormente con papel de platino y cinta de embalar, con el objetivo de que los efectos sustraídos no fueran detectados por los sistemas de seguridad. Ninguno de los jóvenes tiene antecedentes policiales por delitos anteriores.

Los imputados, de entre 21 y 32 años, tienen su domicilio en San Isidro.