La Policía Nacional ha detenido a cinco personas en Gran Canaria al desarticular una organización dedicada a falsificar ropa deportiva, en una operación que le ha permitido incautarse de 40.000 prendas falsas, entre ellas 10.000 equipaciones del FC Barcelona, el Real Madrid y la selección.

Además, los agentes han requisado 105.000 dispositivos para estampar en nuevas prendas los logotipos de marcas como Nike, Adidas, Calvin Klein, Ralph Lauren y Tommy Hilfiger, entre otras, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía de Canarias.

La organización desarticulada estaba compuesta, al parecer, por los cinco detenidos y por otras nueve personas que han sido imputadas bajo la acusación de colaborar para que esas prendas falsas se distribuyeran en más de un centenar de tiendas y puestos de mercadillos de las islas de Gran Canaria, Lanzarote y Fuerteventura. La operación, denominada "Fullbacci", se abrió el pasado mes de abril, al tenerse conocimiento de la posible existencia en Canarias de una red dedicada a la falsificación de ropa deportiva.

El primero de los dos registros realizados se llevó a cabo en un almacén de un centro comercial del municipio de San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria), desde donde se había comprobado que se enviaban hacia otras islas del Archipiélago cajas cargadas con equipaciones de fútbol falsas.

El segundo registro se practicó en un almacén de la localidad de Vecindario, también en Gran Canaria, sobre el que tenían sospechas de que podía ser el punto donde se elaboraban las falsificaciones.

Como complemento de esos dos registros, la Policía ha inspeccionado varios locales de un centro comercial de Playa del Inglés, donde se han requisado 3.000 prendas supuestamente procedentes de los dos almacenes utilizados por los falsificadores.

La Policía, que cifra en medio millón de euros el valor de las prendas intervenidas, resaltó que se ha asestado un "importante golpe" a la venta de ropa falsificada, no solo por la cantidad de equipaciones requisadas, sino por la capacidad de producción que tenía la organización y por la extensión de sus puntos de venta.

"Esta actuación supone un verdadero balón de oxígeno para aquellos negocios que actúan ajustándose a la ley y que se veían desbordados por la competencia desleal de los precios de la ropa fraudulenta", aseguró la Policía.