Funcionarios de la Guardia Civil detuvieron recientemente a un hombre de 18 años de edad como supuesto autor de un delito de robo con fuerza en las cosas y otro contra la Administración de Justicia en el término municipal de Santa Úrsula, ya que, no solo se apropió de dinero y joyas por un valor total de 7.000 euros en una vivienda, sino que también agredió a la víctima para intentar evitar que lo denunciara.

El servicio fue desarrollado por agentes destinados en el puesto del Instituto Armado de La Victoria de Acentejo, después de que el propietario de la casa los informara de los citados hechos.

El joven está acusado de acceder a un domicilio en el mencionado municipio norteño, después de romper el cristal de una de las ventanas, según las diligencias instruidas por los integrantes del cuerpo de seguridad.

Una vez en el interior del edificio, el individuo presuntamente sustrajo joyas por un valor de 2.000 euros. A dichos objetos de valor, hay que añadir que el arrestado supuestamente robó 5.000 euros en metálico, en función de la denuncia.

Sin embargo, al comprobar que el dueño del inmueble al que había accedido lo había descubierto, llegó a agredirlo físicamente con el objetivo de que no lo denunciara.

Tras ser arrestado, el acusado fue trasladado hasta las dependencias del cuartel de La Victoria, donde se le instruyeron las oportunas diligencias. Ayer no trascendió si al mismo le constaban antecedentes policiales.

Posteriormente, el ahora acusado fue puesto a disposición del Juzgado del partido de La Orotava que se hallaba en funciones de Guardia.

Coches forzados

Profesionales de la Guardia Civil del puesto principal de Granadilla de Abona también detuvieron a un joven y a un menor de edad como supuestos autores de un delito de robo con fuerza en grado de tentativa. El servicio se produjo cuando una patrulla sorprendió a un hombre de 20 años y a un adolescente de 17 años en el momento en que intentaban forzar las puertas de varios vehículos que estaban estacionados en la vía pública.

Los hechos ocurrieron en la localidad de San Isidro y los funcionarios del Instituto Armado intervinieron a los apresados los efectos que empleaban para la comisión del mencionado hecho delictivo.