La congresista estadounidense Gabrielle Giffords, tiroteada en la cabeza el pasado sábado, ha registrado "importante avances" en su recuperación y ya "puede mover ambas piernas y los brazos", informaron hoy los doctores.

"Está mostrando reacciones más y más espontáneas (...), ya es capaz de mover ambas piernas", dijo en su rueda de prensa diaria Michael Lemole, neurocirujano del Centro Médico de la Universidad de Arizona.

Lemole calificó también de "un importante salto adelante" cuando el miércoles Giffords abrió "los ojos por primera vez" durante la visita del el presidente de EEUU, Barack Obama.

Obama viajó ayer a Tucson para participar en una ceremonia de homenaje a las víctimas del tiroteo, en el que seis personas murieron y otras 14 quedaron heridas, entre ellas la congresista Giffords, considerada según la Policía el objetivo principal del ataque.

"Esto es un gran hito para ella, y esperamos que logre nuevos avances en el proceso de recuperación", dijo Lemole, quien estaba acompañado por el jefe de emergencia del hospital, Peter Rhee.

Para el neurocirujano, la reacción de Giffords respondió "a una presencia familiar pero inesperada".

Asimismo, familiares de Giffords afirmaron que el miércoles, en otro de los gestos "alentadores", intentó tocar a su marido, el astronauta Mark Kelly, quien la acompaña en la habitación del hospital.

Lemole comparó la situación de la congresista, de 40 años, con la de quien va "despertando" de un sueño profundo, pero declaró que "estas reacciones suponen un gran esfuerzo" por lo que es normal que luego sigan momentos en los que vuelva a quedar inconsciente.

La congresista, que continúa conectada a un tubo de respiración para evitar infecciones, se recupera en el mismo hospital que otros cinco heridos en el ataque, de los cuales dos se encuentran graves y tres leves.