Javier Díaz Melián es subcomisario del Cuerpo General de la Policía Canaria (CGPC) y jefe de la Unidad de Menores y Familia (Umefa) en todo el Archipiélago. Está al frente de uno de los grupos que se consolidó desde la puesta en marcha de la entidad y que más actividad ha tenido. Explica que "nuestro objetivo principal es que los menores conflictivos puedan reinsertarse en la sociedad y que, cuando sean adultos, lleven una vida normal". Este mando se muestra convencido de que los adolescentes que tienen problemas de conducta o que han cometido algún delito "pueden ser perfectamente reinsertados". Aclara que ese logro no se alcanza con todos, "pero sí con alto porcentaje de ellos". Para Díaz Melián resulta reconfortante saber que, cuando son mayores de edad, logran tener "un trabajo, una familia, un futuro". Apunta que "eso es lo que más satisfacción nos da"; demuestra que "nuestro trabajo policial merece la pena". Indica que los menores con los que interviene el CGPC y otras fuerzas de seguridad "suelen ser bastante respetuosos con los agentes y saben dónde están sus límites".

Respecto a los crecientes episodios de chicos o chicas que atacan física o emocionalmente a sus padres o abuelos, opina que "es muy triste", ya que los progenitores "dan ese paso con el que saben que van a perder el dominio sobre sus hijos" cuando se quedan sin vías para afrontar el problema. Plantea que "eso significa que algo ha fallado". La Unidad está formada por 25 agentes y mandos en Tenerife y Gran Canaria, aunque también se desplazan a otras islas. Cabe recordar que, a finales del año pasado, los grupos independientes que intervenían en ambas provincias se unificaron en el departamento que ahora dirige Melián. Desde el 2011, este equipo ha realizado un total de 374 ingresos y reingresos en centros de internamiento o recursos de acogida, tanto por orden de la Dirección General de Protección de la Infancia y Familia del Gobierno canario como de las fiscalías de Menores. En unos cinco casos, los funcionarios destinados en la Umefa han contado con la colaboración de cuerpos de policía de otros países para la localización de menores incursos en procedimientos judiciales y que han viajado con sus familias u otras personas a otros países, como el Reino Unido o Alemania, entre otros. Melián agradece públicamente "a mi personal su alta cualificación profesional e implicación diaria en un servicio que tiene un lado humano importante". Una de las acciones que lleva a cabo la Unidad de Menores y Familia es el "Plan Director", en el que también participan Policía Nacional o la Guardia Civil. A través de este proyecto, los agentes dan formación a profesores, familiares y alumnos en materias como ciberacoso, violencia entre iguales o agresiones machistas, entre otras. Gracias a esta iniciativa, el director de cada centro establece contacto con los cuerpos de seguridad por si surge algún problema. A lo largo de su actividad, el equipo de menores de la Policía Autonómica ha intervenido con víctimas de prostitución de menores o situaciones de total abandono de niños, a veces por la propia forma de vida de los padres. Hace años, el Cuerpo General de la Policía Canaria intervino en un caso de explotación sexual de varias menores en viviendas de La Matanza. Y en La Palma los agentes actuaron con tres niños, el mayor de los cuales no superaba los 8 años, que no estaban escolarizados y que únicamente salían del piso para ir a comprar con su padre por la noche. Sus progenitores, de nacionalidad española y de más de 30 años, perdieron la patria potestad de los pequeños, que quedaron bajo custodia del Gobierno canario.