Versace celebró hoy por primera vez un desfile en Nueva York poco después de ser adquirida por la firma estadounidense Michael Kors, en el que presentó una colección "pre fall" 2019 urbana y sofisticada protagonizada por el negro, el oro, los estampados animales y el imperdible.

El avance de otoño tuvo lugar en el edificio de la bolsa de Nueva York, situado en pleno centro financiero de Manhattan, donde las modelos desfilaban alrededor de una enorme escultura dorada de una mano portando una antorcha, una reproducción del estandarte neoyorquino por excelencia, la Estatua de la Libertad.

"Un símbolo de ilustración, empoderamiento y libertad", decía sobre el monumento la directora creativa de la marca, Donatella Versace, en un comunicado.

En esta ocasión, Versace mezcló el carácter lujoso y sofisticado que ha abanderado la casa de moda, de diseños barrocos en negro y dorado, para combinarlo con detalles jóvenes y urbanos, como coloridos estampados animales, telas metalizadas, prendas en charol, o gorros de lana y gorras deportivas.

Los corazones en distintos colores metalizados se vieron también en un buen número de sus diseños, adornando trajes de chaqueta para ellos, y en faldas de tubo por debajo de la rodilla o vapososo vestidos para ellas.

Se vieron más corazones en camisetas con el conocido logotipo "I love NY", al que la firma italiana dio un toque personal imprimiéndolo sobre uno de sus dorados medallones de medusa.

"Mi primer desfile oficial de Versace en Nueva York. Mi ciudad favorita y mi gente favorita", dijo Donatella Versace antes del esperado desfile, del que se mantuvieron en secreto los detalles desde que se anunciara hace poco más de mes y medio.

Los voluminosos y llamativos complementos dorados, como grandes horquillas y pendientes decorados con los clásicos medallones de medusa de Versace, fueron uno de los protagonistas de la colección, que lucieron modelos de la talla de Gigi Hadid, Kaia Gerber, Hailey Baldwin o Amber Valletta.

Entre ellos, el imperdible fue sin duda el gran protagonista, que Versace utilizó para darle un claro toque urbano a la colección y que empleó tanto en grandes pendientes como en colgantes o como elementos decorativos en sus prendas.

Entre las caras conocidas estaban la directora creativa de la edición estadounidense de Vogue, Anna Wintour, la celebridad Kim Kardashian y su marido, Kanye West, además de la cantante Ciara, los raperos 2 Chainz y 21 Savage y el modisto Alexander Wang.

El desfile de hoy se produce después de que el grupo de moda estadounidense Michael Kors acordara el pasado mes de septiembre adquirir la firma italiana Gianni Versace por 2.120 millones de dólares, desembocando en una compañía llamada Capri Holdings.

Pese a la venta de Versace, está previsto que Donatella continúe siendo la directora creativa de la firma italiana, además de una de las accionistas de la empresa.

"La vida me ha enseñado que no hay que mirar atrás, solo andar hacia delante. Y andar hacia delante, actualmente, para una marca como Versace, quiere decir tener una plataforma global. Solo el nuevo grupo podía proporcionar esa plataforma", aseguró entonces Donatella Versace.