Canarias registró el año pasado once denuncias de agresiones de carácter homófobo, casi el 4% de los incidentes de ese tipo que se contabilizaron en el conjunto de España, según datos recogidos por la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales (Felgtb). Esta organización ha denunció ayer que los delitos de odio al colectivo "están normalizados" en la sociedad española y ha alertado de que entre un 60 y un 80 por ciento de los actos violentos que sufren estas personas no se denuncian.

La Federación presentó un informe que analiza 332 agresiones o incidentes de 629 registrados en 2017 por las asociaciones, titulado "La cara oculta de la violencia hacia el colectivo LGTBI" y elaborado por el Observatorio de Redes Contra el Odio de la Felgtb por quinto año consecutivo.

"No tenemos un mapa real, completo y riguroso de todo lo que está pasando en este país en cuanto a violencias al colectivo se refiere", puntualizó el responsable del Observatorio, Jesús Generelo, ya que es imposible saber el número exacto de incidentes al no denunciarse o registrarse en asociaciones y porque estos delitos "están normalizados" en la sociedad.

La muestra partía de 629 casos registrados, aunque solo se han analizado aquellos que podían homogeneizarse para llegar a conclusiones, es decir, 332.

Según remarcó Generelo, el total de incidentes registrados "triplican" los datos del último informe del Ministerio del Interior, y duplican las cifras que manejaba el último estudio del Observatorio de Redes Contra el Odio.

"¿Se han duplicado los delitos de odio? Es que no lo sabemos", incidió Generelo, mientras que la responsable de investigación de la Federación, Violeta Assiego, afirmó que estos datos son "sólo la punta del iceberg".

El acoso escolar, la invisibilidad de las personas LGTB -sobre todo trans- en los puestos de trabajo, la "armarización" de las personas mayores del colectivo, que muchas veces no comunican su orientación sexual o identidad de género ni a sus médicos de cabecera, son algunos de los datos resaltados.

El informe arroja que el 73% de las víctimas fueron hombres gais y el 21% mujeres lesbianas, mientras que el porcentaje de casos de personas bisexuales asciende hasta el 2 %. De los 332 casos analizados, 21 corresponden a personas transexuales (18 mujeres y 3 hombres); uno a una persona no binaria; otro a una que no define su género, y en 15 ocasiones la víctima no sabe o no contesta.

Un total de 292 delitos o incidentes corresponden a personas cisexuales -cuya identidad de género se corresponde con el sexo asignado al nacer-, desglosado en 222 hombres (71% de la muestra) y 70 mujeres (22%).

La franja de edad de 18 a 35 años es en la que más agresiones se han registrado (53%), seguida de 36 a 50 años (31%) y de víctimas menores de 18 años (12%), siendo los mayores de 51 años el grupo menos representado con un 4%.

De los casos analizados, 130 se dieron en Cataluña y le sigue Madrid, con 73 agresiones. Baleares, Extremadura, La Rioja y País Vasco tuvieron una agresión.

El 7 % de los autores pertenece al entorno familiar de la víctima; el 17%, al entorno cercano; el 12% son vecinos, el 36% desconocidos; el 7 % empleados de comercios y el 4% porteros de locales nocturnos.

La presidenta de la Federación, Uge Sangil, exigió a los grupos parlamentarios "rapidez" en la aprobación de la ley de igualdad LGTBI.