Un sensor que quedó "deformado" durante el proceso de ensamblaje del cohete Soyuz-FG y que es clave en la separación de la primera y segunda fase causó el accidente de la nave Soyuz el pasado 11 de octubre, informó hoy el jefe de la comisión de investigación, Oleg Skorobogatov.

Dos cohetes ensamblados de la misma manera en el cosmódromo ruso de Baikonur, en Kazajistán, y la base aeroespacial europea de Kourou, en la Guayana Francesa, tienen el mismo defecto que el que falló en octubre, dijo en rueda de prensa Skorobogatov.