El Observatorio del Roque de Los Muchachos, en La Palma, acogerá el próximo 10 de octubre la inauguración del prototipo de la red de telescopios Cherenkov, acto que contará con la presencia del ministro de Ciencia y Tecnología, Pedro Duque.

La red Cherenkov estará dedicada a la observación de rayos gamma de muy alta energía y constará de más de 100 telescopios, de tres tamaños diferentes, localizados en los dos hemisferios.

A la inauguración está previsto que asistan cerca de 200 invitados, entre los que se encuentran representantes de los institutos del consorcio CTA y del subconsorcio que construye los LST, miembros de las instituciones usuarias del Observatorio del Roque y una amplia representación de autoridades políticas.

Aparte de Pedro Duque, en el acto intervendrán Fernando Clavijo, presidente del Gobierno de Canarias; Anselmo Pestana, presidente del Cabildo de La Palma; Masahiro Teshima, director del Instituto Max Planck de Física de Múnich, investigador principal y portavoz de la colaboración LST; Rafael Rebolo, director del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC); Takaaki Kajita, director del Institute for Cosmic Ray Research (ICRR Tokio) y Premio Nobel de Física 2015; Federico Ferrini, director General de CTA; Masashi Mizukami, embajador de Japón en España, y Masashi Haneda, vicepresidente de la Universidad de Tokio. Los LST, con un espejo de 23 metros de diámetro, son los telescopios más grandes de la red CTA.

El LST-1 es el prototipo de los 4 telescopios de este tipo que se instalarán en el observatorio Norte, situado en el ORM, y estarán rodeados de varios telescopios de 12 metros de diámetro o "Medium Size Telescopes" (MST), señala el IAC en una nota.

En el observatorio Sur, en Chile, además de estos dos tipos de telescopios, se instalará un tercer tipo de 6 metros de diámetro denominados "Small Size Telescopes" (SST). En conjunto, CTA podrá detectar, con una precisión y sensibilidad sin precedentes, rayos gamma en un amplio rango de energías, lo que proporcionará una visión completamente nueva del cielo.

El LST-1 tiene una superficie reflectante de 400 metros cuadrados sostenida por una estructura de tubos de fibra de carbono y de acero.

El prototipo mide 45 metros de alto y pesa alrededor de 100 toneladas y, sin embargo, es extremadamente ágil, con la capacidad de reposicionarse en 20 segundos para capturar señales de estallidos de rayos gamma (o GRBs por sus siglas en inglés).