Pedro López concluye su sexto año como presidente de la Junta de Hermandades y Cofradías (JHC) de La Laguna tras la dispensa de un mandato que, por la falta de candidatos, le otorgó el Obispado en 2016. En esta entrevista, realizada en la mañana de ayer, hace balance de su etapa como dirigente cofrade y del presente de estos colectivos religiosos. "Sinceramente, no creo que exista riesgo de que desaparezcan, pero no debemos confiarnos", señala este médico lagunero de 40 años.

¿Cómo ha ido esta edición de la Semana Santa de La Laguna?

Bien. Estuvimos preocupados por la inestabilidad meteorológica, pero al final no menguó la asistencia de público. Hay que felicitar a las hermandades por su trabajo durante la Cuaresma.

Lo mejor y lo peor...

Lo mejor: que no ha habido incidencias y la cercanía de las hermandades a la gente. Lo peor: que tenemos que buscar cómo atraer a más cofrades; que no solo salga a la calle una procesión, sino que transmitamos algo más.

¿Qué está fallando con la afluencia de público a los desfiles, sobre todo a los que no son el Jueves y Viernes Santo?

La hora. Tenemos un problema: está la hora laboral de los cofrades y la de vida de la ciudad. Tampoco podemos adelantar demasiado, porque mucha gente acaba de trabajar a las 20:00, pero lo que no puede ser es que tengamos una procesión en días laborables hasta las 23:30 en la calle.

¿De qué está especialmente satisfecho de sus años al frente de esta institución?

Del crecimiento; de entrar como secretario con un archivador, un CD y una habitación de 15 o 20 metros cuadrados, y salir con el presupuesto más elevado que ha habido, la alta colaboración con las hermandades, el número de actividades en Cuaresma...

¿Se ha sentido respaldado por el Obispado?

Por parte del Obispado en su globalidad me he sentido apoyado, aunque puede ser que en algún momento hubiera requerido más ayuda y colaboración de algunos de sus estamentos.

¿Cómo ha ido encajando los comentarios de las esquinas?

Sería irreal que dijera que no me han sentado mal algunas críticas. Sin embargo, también me han llevado a darme cuenta de equivocaciones.

En una entrevista el pasado domingo en este periódico, el obispo, Bernardo Álvarez, planteaba que en la formación de los cofrades queda un "camino importante por recorrer". ¿Le molestó la afirmación?

No.

¿La comparte?

Sí. Debemos de seguir mejorando en la formación desde todos los puntos de vista; no solo nos debemos ceñir a la formación espiritual y cristiana, sino también en lo cofrade y saber cuáles son los elementos de una hermandad, el porqué de la simbología?

Otra de las principales manifestaciones de Álvarez en esa entrevista fue que las procesiones no se hacen para una exhibición artística; que para eso mejor montar un museo?

Nosotros estamos en la calle para una labor "catequética". Yo creo que por ahí iba la respuesta. Pero también digo: ¿y por qué no puede haber alguien que se acerque a una procesión desde el punto de vista museístico? ¿Tiene cabida? Sí. No debemos olvidar que tal vez esa persona que acude pensando en el aspecto artístico de la procesión se vea atraída por la idea mística.

¿Ahora mismo la tradición gana a la fe en las cofradías?

Sí; puede ser. Pero no tenemos que demonizar la palabra "tradición" frente a "fe".

Hay quienes van incluso más allá y dicen que todo es un postureo, el salir con las varas de mando, buscar una cuota de poder? ¿Qué opina?

Es verdad que hay mucho postureo en la Semana Santa, es obvio, es que lo vemos. Decir que no hay postureo sería como querer tapar el sol con mi dedo. De nuevo, una palabra que tenemos que utilizar: formación. Hemos de darnos cuenta de que eso no vale la pena y de que tampoco nos lleva a ningún lado.

¿Cómo ve el futuro de las cofradías? ¿Hay riesgo de que desaparezcan?

Sinceramente, no creo que exista ese riesgo, pero no debemos confiarnos.

¿Cree que la Semana Santa de La Laguna es ahora mismo la primera de Canarias?

No.

¿Cuál es la primera?

No puedo decir cuál, pero sí que la de La Laguna no es, aunque sí es la mejor, porque tiene la colección de imaginería más destacada del Archipiélago canario, es donde existe el mayor número de cofrades...

Es frecuente que hermandades que deciden incorporar piezas de imaginería u orfebrería se van directamente a la estética andaluza sin buscar ningún nexo con lo local ni punto intermedio. ¿Está de acuerdo con que cada cofradía tenga autonomía y que eso se siga permitiendo?

Cada hermandad tiene que tener autonomía; está recogido en los estatutos. El Obispado cuenta con una Delegación de Patrimonio para ese tipo de cosas. Hemos de seguir insistiendo en que La Laguna es una amalgama de ideas, que no solo somos una Semana Santa castellana y austera, ni tampoco andaluza. Considero que debemos continuar buscando esa línea de la mezcla. Sin embargo, nosotros sí podemos provocar que dentro de las hermandades haya una serie de encuentros para discutir qué es lo que más conviene. Por ejemplo, yo tengo claro que es necesario recuperar algunas imágenes que no salen a la calle. Un ejemplo: la Sentencia del monasterio de Las Claras.

¿La fe es una cuestión de moda?

En ciertas personas, sí. Es como lo de si la fe es cuestión de si hay crisis?

¿Cuál es su opinión de la Iglesia, sus decisiones, su labor??

Estamos en un momento importante de la sociedad en el que esta camina a un ritmo determinado. La Iglesia está perdiendo un poco esa comba; no obstante, gracias al papa, en algunas situaciones está cogiéndole el "aire".

¿Qué le parecería que la Virgen de Candelaria fuese presidenta honoraria del Cabildo de Tenerife?

Como cristiano me parece bien, pero yo no soy quien lo elige. Creo que eso no debe nacer de las instituciones, sino salir del pueblo.

¿Y el pueblo lo pide?

Sé que a la Junta de Hermandades han llegado solicitudes para que apoye y que hay personas que como cofrades están recogiendo firmas.

Hasta la mañana de ayer no se había registrado ninguna candidatura a dirigir la Junta de Hermandades, el principal órgano de gestión de la Semana Santa de La Laguna. Esta cuenta con un comité propio -que se elige cada dos años- y celebra reuniones a las que asisten representantes de cada una de las cofradías. El cargo de Pedro López en los últimos seis años ha sido el de máximo responsable de esa junta directiva. En las anteriores elecciones, en 2016, lo que ocurrió fue que culminó el plazo y nadie se presentó. Por eso continuó López.

¿Y si sucediese lo mismo otra vez? "Pues no sé qué podrá pasar; pero yo ya es verdad que creo que no debo seguir. No es por ningún problema, sino por dos motivos básicos: es necesaria una renovación y nuevas ideas, así como porque ya son diez años aquí si se cuentan los cuatro previos en el cargo de secretario". ¿Y si las hermandades le insistiesen? "No creo que continúe. Está claro que nunca se puede decir nunca jamás, pero no en esto, sino en la vida, y quiero que quede claro que no estoy dejando la puerta abierta a nada. Pero no, yo considero que no, que no es sano, ni institucional ni personalmente", expresa.