El potente Telescopio Espacial James Webb (JWST), considerado como el sucesor del "Hubble", será lanzado al espacio un año más tarde de lo previsto, "en torno a mayo de 2020", anunció hoy la Agencia Espacial Europea (ESA).

"El JWST requiere grandes dosis de audacia y necesitamos centrarnos en el éxito de la misión, junto a la NASA y la Agencia Espacial Canadiense. Por ello, procederemos a un trabajo de integración final que demanda un tiempo adicional", declaró en un comunicado Günther Hasinger, el director del departamento de Ciencia de la ESA.

El lanzamiento del nuevo telescopio espacial, el más grande y sofisticado que se ha construido, ha contado con dos atrasos recientes, pues se aguardaba una puesta en órbita primero en octubre de 2018 y luego en la primavera de 2019.

Según la ESA, los estadounidenses de la NASA estimaron que "es necesario más tiempo para probar e integrar" los componentes del James Webb.

Estas pruebas adicionales se llevarán a cabo en el observatorio del contratista Northrop Grumman Aerospace Systems en Redondo Beach (California, Estados Unidos).

La agencia europea señaló que trabajará con la NASA "en una nueva fecha de preparación para el lanzamiento del vehículo Ariane 5 que lanzará JWST al espacio".

El telescopio James Webb cuenta con complejas y vanguardistas aplicaciones, entre ellas la Cámara para el Infrarrojo Cercano (NIRCam).

Este instrumento está diseñado principalmente para buscar estrellas, cúmulos estelares y núcleos de galaxias primigenios formados tras el "Big Bang", descubrir supernovas en galaxias remotas y analizar la población estelar de galaxias cercanas, entre otras tareas.