La presidenta del Observatorio de Violencia de Género y Vocal del Consejo General del Poder Judicial, María Ángeles Carmona, reconoció ayer que "todos" los asesinatos por violencia de género son "un fallo del sistema", tanto si ha habido denuncia previa como si no.

Carmona, quien considera además "un fallo garrafal" la muerte de una mujer que haya denunciado maltrato, subrayó que "en este país no nos podemos permitir más muertes por violencia de género" y por eso ha destacado que la coordinación de todas las instituciones es "el punto de partida para proteger mejor a la mujer".

En declaraciones a los medios en un receso de una jornada sobre Violencia de Género organizada por el Gobierno de Aragón en Zaragoza, Carmona destacó la necesidad de aprender, sobre todo los médicos, a detectar cuando se está produciendo este tipo de violencia. El objetivo es que puedan informar a las mujeres y a las adolescentes que están empezando a tener relaciones afectivas cuáles son los indicios de maltrato, como serían los celos excesivos, el aislamiento del resto de familia o amigos, la imposición de una forma de vestir, un seguimiento excesivo a través de las redes sociales, móviles o nuevas tecnologías.

Según Carmona, quien en la jornada habló sobre "La valoración forense de la violencia de género", no existe un perfil de mujer víctima de este tipo de violencia porque puede serlo de cualquier estatus social, aunque las más vulnerables son las menores de edad, las que están afectadas por extrema pobreza, las inmigrantes en situación irregular y quienes están afectadas por una discapacidad.

Pero, además, reconoció que en los últimos informes del Observatorio también se ha detectado un alto porcentaje de este maltrato en poblaciones de menos de cien mil habitantes, por lo que la "ruralidad" es un indicio de vulnerabilidad y por la información tiene que "llegar a todos los rincones".