Cuatro vehículos ardieron completamente y otros 15 sufrieron diversos daños parciales en el incendio registrado en el garaje de un edificio situado en el barrio de San Matías durante la madrugada de ayer.

Según fuentes consultadas del Consorcio de Bomberos, las llamas se iniciaron en uno de los automóviles que quedaron calcinados.

Y ahora agentes de la Brigada de Policía Científica de la Policía Nacional de la Comisaría de La Laguna deberán determinar si el incendio se produjo de forma fortuita o de manera intencionada.

Pasadas las 3:15 horas en un edificio situado en la calle San Andrés, promovido por la empresa pública del Gobierno canario Visocan, se detectó el incendio.

Además de los daños ocasionados en los diferentes automóviles, las llamas dejaron inservible la tubería principal de abastecimiento de agua a los residentes en el edificio.

Dicha conducción quedó dañada a lo largo de varios metros, según los datos que trascendieron ayer.

Fuentes vecinales del edificio afectado manifestaron que ayer estuvieron sin suministro de agua hasta las 18:00 horas aproximadamente, debido a la citada incidencia.

El fuego también destrozó el enfoscado del techo, así como diferentes luminarias.

En el momento del suceso, en el garaje había unos cuarenta coches en total.

Hasta el inmueble situado en la calle San Andrés acudieron un total de tres dotaciones del Consorcio de Bomberos de Tenerife del parque de Tomé Cano.

Al llegar, los bomberos debieron acceder por la única puerta de garaje que posee el inmueble.

Desde la Consejería de Vivienda del Gobierno canario manifestaron ayer que el edificio que resultó afectado es una promoción en régimen de alquiler y que en la empresa Visocan estaban a la espera de conocer del resultados del informe técnico y del análisis policial para conocer las causas del incendio.

Desde el Ejecutivo autónomo mostraron apoyo a los vecinos del citado edificio para solucionar el problema y reparar los daños existentes.

Además, el alcalde de La Laguna, José Alberto Díaz, y un técnico de Visocan visitaron el edificio.

Díaz se mostró preocupado por el estado de los vecinos que ocupan las 47 viviendas del inmueble afectado. Y es que, además del agua, los residentes tampoco contaban con línea de telefonía fija ni con conexión de televisión. El alcalde se comprometió a hacer un seguimiento de la situación y trató de tranquilizar a los vecinos acerca del alcance de los daños provocados por el fuego.