Este mes se estrena la evaluación final de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) fijada por la Lomce, aunque más "descafeinada" que en un primer momento, ya que hasta lograr un pacto educativo se ha fijado que tenga carácter muestral y no sea necesaria para titularse en esta etapa.

Durante mayo y junio las comunidades autónomas realizarán la prueba a alumnos que cursen cuarto de ESO (15 y 16 años), con independencia de sus calificaciones, y la finalidad de la evaluación será de diagnóstico. Lo establece así la orden del Ministerio de Educación publicada el pasado sábado en el BOE y que regula las pruebas.

"La selección de alumnos y centros será suficiente para obtener datos representativos, pero las Administraciones educativas pueden elevar el número de centros participantes por encima de las necesidades muestrales, o hacer la evaluación final con carácter censal", según el documento.

Por tanto, se han redefinido las características propuestas en un principio en la Lomce, lideradas por el entonces ministro José Ignacio Wert, es decir, que fuera obligatoria para todo el alumno que quisiera conseguir el título de Secundaria, se podía preguntar sobre materias de toda la etapa, había que obtener una calificación igual o superior a 5 puntos y se debían celebrar dos convocatorias anuales.

La Rioja es de las primeras comunidades en realizar la prueba, puesto que la lleva a cabo esta semana, mientras que Madrid la hará el 17 de mayo. También este mes las realizan, entre otras, Cantabria (del 22 al 26), Galicia (del 23 al 24), Asturias (día 24), Castilla-La Mancha (del 25 al 26),la Comunidad Valenciana (finales de mayo) y el País Vasco.