Un estudio transversal llevado a cabo por el grupo en nutrición y ciencias de la alimentación de la Facultad de Farmacia de la Universidad CEU San Pablo ha detectado que los niños y adolescentes celíacos presentan una ingesta insuficiente de vitamina C.

El trabajo, en el que ha colaborado la Asociación de Celíacos y Sensibles al Gluten de Madrid y la financiación de la Fundación Mapfre, ha evaluado el estado nutricional de un grupo de población infantil y juvenil (entre 4 y 18 años) con enfermedad celíaca, comparado con un grupo control de las mismas características residentes en la Comunidad de Madrid.

Los resultados han demostrado que es necesario el seguimiento nutricional de las personas con enfermedad celíaca, con el objetivo de identificar las necesidades concretas y evaluar las posibles carencias derivadas de la dieta sin gluten, así como el efecto del consumo habitual de los productos sin gluten comerciales. Todo ello orientado a poder establecer una estrategia de nutrición de precisión para los colectivos afectados.

En este sentido, los investigadores han destacado la necesidad de seguir trabajando sobre el estado nutricional, especialmente en vitamina D, y la necesidad de completar, mejorar y dar visibilidad a la composición nutricional completa de los productos específicamente diseñados para el colectivo celíaco.

Aunque los resultados de la investigación han revelado que en ambos grupos celíacos y no celíacos, existe un alto riesgo de ingesta insuficiente de vitamina D, éste es más acusado en el primero, pese a la gran importancia que tiene en el crecimiento, maduración y mantenimiento del sistema óseo y a que su déficit podría relacionarse incluso con los cuadros de autoinmunidad.

Además, las ingestas medias en los niños y jóvenes celíacos de otros nutrientes como el calcio, ácido fólico, hierro, magnesio, vitamina E y vitamina D están por debajo del 80 % de las recomendaciones nutricionales.