La temporada de gripe en España ha arrancado 2017 con un aumento de casos del 26 por ciento en sólo una semana, según los últimos datos de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica del Instituto de Salud Carlos III, que muestra cómo continúa la fase de ascenso de la onda epidémica iniciada a mediados de diciembre.

El informe del Sistema de Vigilancia de la Gripe, relativo a la semana del 2 al 8 de enero, muestra una tasa de 174,48 casos por cada 100.000 habitantes, frente a los 138,17 casos de la semana anterior, muy por encima ya del umbral basal (55,68) fijado para esta temporada 2016-2017.

Asimismo, señala un nivel de intensidad muy alto en Castilla y León, medio en Baleares, Cataluña, Cantabria, Melilla, Navarra, La Rioja y País Vasco y bajo en el resto de redes centinela, con excepción de Ceuta con nivel basal. La difusión de la enfermedad es epidémica en todo el territorio vigilado excepto en Andalucía, Canarias, Ceuta, Comunidad Valenciana y Extremadura, donde es esporádica.