La Organización Internacional del Trabajo (OIT) asegura que el alto nivel educativo parece haber protegido a la generación más joven en España contra el "apreciable" aumento del desempleo en los últimos años, según recoge la última edición de los Indicadores Clave del Mercado de Trabajo (KILM) de la OIT.

La Organización, que destaca en especial el caso de España, subraya que de los 33 países sobre los que se dispone de datos, solo cinco experimentaron una disminución de la proporción de jóvenes desocupados con estudios superiores completados entre los 10 y los 15 últimos años.

Sin embargo, la organización advierte de que la tasa de desocupación de las personas con un nivel equivalente o inferior al de la enseñanza primaria en España y Grecia aumentó en "nada menos" que 20 puntos porcentuales, lo cual refleja "la gravedad de la crisis económica" que afecta a estos dos países desde 2008.

En esta línea, añade que en España la tasa de desocupación de las personas cuyo nivel de estudios es equivalente o inferior al de la enseñanza primaria (35,1%) era en 2013 más que el doble de la de los graduados universitarios (16%). "En España, la tasa más elevada de desempleo tiene lugar entre las personas de menor nivel educativo", incide.

Por el contrario, resalta que en otros países, como Chipre, Moldavia y Mongolia, las personas jóvenes con un nivel de formación alto parecen estar ante un "tapón" en materia de empleo, lo que podría indicar falta de suficientes puestos de trabajo de nivel profesional y de puestos técnicos de grado superior para absorber la cantidad de personas calificadas en la fuerza de trabajo.

Tras estos datos, la OIT insta a interpretar estos resultados "con prudencia", pues los estudios superiores por lo general solo se completan a finales del tramo de edad juvenil, que corresponde a las edades de entre 15 y 24 años. En términos generales, el informe refleja que el nivel de educación de la fuerza de trabajo está aumentando en todo el mundo, pero constata que el acceso a la enseñanza superior no produce una disminución del desempleo a nivel mundial.

Según la última edición de los KILM, salvo dos, los 64 países con datos disponibles registraron un incremento en la proporción de la fuerza laboral con estudios superiores en los últimos 15 años, siendo Canadá, Luxemburgo y Rusia donde se registraron los mayores aumentos. Al mismo tiempo, el informe elaborado por la organización recoge una caída en la proporción de la población activa con tan solo un nivel de educación primaria o inferior. "Esta es una evolución positiva para los individuos, ya que los trabajadores más instruidos tienden a recibir mayores ingresos y a obtener mejores condiciones de trabajo", remarcó el responsable de la Unidad de Producción y Análisis de Datos del Departamento de Estadística la OIT, Steven Kapsos.