La Asociación de Afectadas por la Vacuna del Papiloma Humano (Aavp) relacionó ayer este tratamiento con la muerte de tres niñas españolas, con más de 700 notificaciones de reacciones adversas solo hasta 2012 y con cinco denuncias judiciales.

La presidenta de la Aavp, Alicia Capilla, aseguró en una rueda de prensa, tras reunirse con la directora general de Salud Pública del Ministerio de Sanidad, Mercedes Vinuesa, que la Agencia Europea del Medicamento ha registrado "más de 150 notificaciones -por esta vacuna- que acabaron en muerte".

"Existen tres sospechas de muertes por esta vacuna en España: en Asturias, Valencia y Cataluña", dijo.

Este colectivo lleva cinco años criticando que el Ministerio de Sanidad "no quiere reconocer las reacciones adversas que algunas jóvenes padecen tras recibir esta vacuna" y pide que se actualice el número de notificaciones de sospechas, ya que el último dato oficial es de hace dos años.

La Asociación pidió al Gobierno la retirada de esta inmunización porque "no es necesaria, ni efectiva"; que se reconozcan sus efectos adversos, tales como "problemas neurológicos"; una atención sanitaria adecuada para las afectadas; un fondo de compensación por daños y un protocolo de actuación.

Tras la reunión, Capilla y el abogado Francisco Almodóvar, que lleva los casos de estas jóvenes, coincidieron en mostrarse "contentos" y "optimistas" porque les han trasladado que se estudiarán sus peticiones y se volverán a reunir en las próximas semanas.

Capilla explicó que la inmunización del papiloma humano no es obligatoria, pero tiene "apariencia de obligatoriedad" para las niñas de 14 años, como consta en el calendario vacunal, y criticó que no se informe de los efectos adversos que tiene, que, sin embargo, sí aparecen en la ficha técnica del medicamento.