Elegir el colegio de los hijos es una de las grandes responsabilidades de los padres y, hacerlo bien, especialmente cuando existe una gran variedad de ellos, pasa por conocer las ventajas e inconvenientes que pueden tener los centros públicos, privados y concertados.

Expertos en educación explican que los idiomas, las nuevas tecnologías, los programas de convivencia, los valores que se fomentan, la renovación pedagógica o las instalaciones son algunos de los principales puntos en los que los padres deben fijarse a la hora de escoger dónde llevar a sus hijos.

"Si la escuela quiere preparar para la vida tiene que ser como la vida" y la pública, además de ser pionera en la implantación de programas bilingües y sobre nuevas tecnologías, tiene una diversidad de alumnado que "responde" a lo que luego los niños se van a encontrar en la vida, afirma el presidente de la Federación de la Enseñanza de CCOO, Francisco García.

La libertad de elección de los padres es la filosofía de los centros concertados, según destaca Francisco José Flores, secretario general de la Confederación Española de Centros de Enseñanza.

"Priorizamos el derecho de los padres" para que lo que vayan a encontrar en un centro se adecúe a sus necesidades o ideas sobre la mejor educación de sus hijos, como puede ser una enseñanza personalizada, idiomas concretos, tecnologías, educación diferenciada o mixta, de titularidad religiosa o laica, dice.

Por su parte, la directora de Márketing y Comunicación de los colegios privados Brains, Elvira López, sostiene que la diferencia principal con un colegio público es el "permanente esfuerzo por innovar. Los colegios privados por la competencia, sobre todo con los concertados, que hasta hace poco tiempo tenía más recursos que ahora, han tenido que estar siempre haciendo un esfuerzo extra para estar por delante del resto", asegura.