La madrugada del sábado al domingo deberán retrasarse los relojes una hora -a las 02:00 hora canaria habrá que atrasar las manillas a la una-, con lo que el día 28 tendrá oficialmente una hora más.

Este cambio de hora, que en la Península será de las tres de la madrugada a las dos, se produce todos los años el último domingo de octubre en cumplimiento de una directiva europea. Por tanto, afecta obligatoriamente a todos los Estados miembro de la UE.

La medida, según cálculos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía, supone un ahorro del 3 % en iluminación entre los meses de marzo a octubre, lo que equivale a 300 millones de euros.

De esa cantidad, noventa millones corresponden al potencial de los hogares españoles -alrededor de seis euros por hogar-, mientras que los 210 millones restantes se ahorran en los edificios del terciario y en la industria, explica el IDAE.

Para alcanzar este potencial de ahorro, no obstante, hay que ser responsable en el hogar a la hora de prescindir de la iluminación artificial cuando es innecesaria.