La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo encargada de juzgar al juez Baltasar Garzón por autorizar las escuchas del caso ''Gürtel'' ha citado para este miércoles a seis testigos que declararán en la causa en la que se investiga la intervención de las comunicaciones que mantuvieron en prisión los cabecillas de la presunta trama corrupta con sus abogados.

El tribunal, presidido por el magistrado Joaquín Giménez, tomará declaración en calidad de testigo al policía nacional que realizó la grabación de las entrevistas entre los letrados y los principales encausados de la red delictiva Francisco Correa, Pablo Crespo y Antoine Sánchez.

Esta comparecencia ha sido propuesta por las partes de la acusación, que piden penas de multa e inhabilitación especial de 10 a 17 años por un delito continuado de prevaricación y otro de uso de artificios de escucha y grabación con violación de las garantías constitucionales.

El Supremo quiere además escuchar el testimonio de tres agentes de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF), del funcionario del juzgado de Garzón liberado para el caso Gürtel Vicente Maroto, y del ex fiscal de la Audiencia Nacional y abogado del empresario José Luis Ulibarri Ignacio Peláez, autor de la querella inicial que dio lugar a este procedimiento.

La defensa de Garzón, ejercida por el abogado sevillano Francisco Baena Bocanegra, ha solicitado la declaración del comisario jefe de la UDEF y de dos funcionarios de esta unidad para preguntarles las razones por las que solicitaron ''pinchar'' las conversaciones entre los abogados y los imputados de la Gürtel.

El tribunal ha señalado tres sesiones para celebrar el juicio por las escuchas de la Gürtel y pretende escuchar en principio las comparecencias testificales este miércoles, sin perjuicio de que puedan extenderse a días posteriores.

AUDICIÓN A PUERTA CERRADA

Además, ha aceptado la audición a puerta cerrada de algunas de las conversaciones que fueron intervenidas siempre que las partes justifiquen su interés para la causa y acoten los fragmentos relevantes. En la primera sesión también ha admitido la testifical del funcionario Vicente Maroto, que alertó a algunos letrados de que sus comunicaciones estaban siendo grabadas.

No obstante, los magistrados han rechazado las cuestiones previas relativas a las recusaciones de los magistrados Luciano Valera -instructor de la causa abierta por la investigación de los crímenes del franquismo-- y Manuel Marchena - instructor de los cobros de Nueva York-- alegando que "ya han sido resueltas" con anterioridad.

Los jueces también se han opuesto a que la Sala del 61 actúe como tribunal de apelación en caso de condena, como solicitaba la defensa, ya que la legislación vigente no lo contempla "guste o no guste" y corresponde al poder legislativo la reforma de los textos legales.

El tribunal se encuentra formado por los magistrados Joaquín Giménez, Luciano Varela, Manuel Marchena, Andrés Martínez Arrieta, Francisco Monterde, Juan Manuel Berdugo y Miguel Colmenero, quien será el ponente de la sentencia sobre las escuchas de la Gürtel.

APOYOS A GARZÓN EN EL TRIBUNAL SUPREMO

El titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, suspendido cautelarmente de sus funciones desde mayo de 2010, se enfrenta desde este dmartes al primer juicio de las tres causas que tiene abiertas en su contra en el Tribunal Supremo.

A las 10.11 horas, el magistrado ha subido, tranquilo, sonriente y sin querer hacer declaraciones, las escalinatas del alto tribunal y lo ha hecho entre los gritos de "fascista", que profería medio centenar de partidarios del juez al Supremo. Simpatizantes como la actriz Pilar Bardem han registrado un escrito ante el TS solicitando la "dimisión" de la Sala de lo Penal por haber perdido "toda noción de Justicia".

A la entrada del Salón de Plenos, decenas de personas han dedicado un sonoro aplauso al magistrado antes de que se adentrara en la vista oral. Entre el público asistente al juicio, se encontraban colegas de la Audiencia Nacional del juez así como miembros de colectivos de la memoria histórica.

Varios integrantes de la Asociación de Familiares de Republicanos Desaparecidos (AFAREDES) han aprovechado un receso, que ha efectuado la Sala para estudiar las cuestiones previas, para agradecer al juez su labor en favor de los desaparecidos en la dictadura. Garzón ha agradecido su apoyo, según han explicado a Europa Press miembros del colectivo.

Tras resolver la fase de cuestiones previas, el tribunal ha reanudado con el interrogatorio de Garzón el juicio por la intervención ilícita de las comunicaciones de los principales encausados en la red delictiva que salpicó al Partido Popular.

Ante el tribunal, el imputado se ha quitado la toga de magistrado, ha negado que el objetivo de las escuchas fuera conocer las estrategias de defensa y las ha justificado en la necesidad de evitar que los implicados blanquearan dinero en el extranjero.

SE ENFRENTA A LA EXPULSIÓN DE LA CARRERA

En esta causa se investiga si el magistrado prevaricó al dictar en febrero y marzo de 2009 los dos autos que ordenaron la intervención de las comunicaciones de la trama de corrupción que salpicó a cargos del PP.

Los fiscales Pilar Fernández Valcarce y Antolín Herrero piden la absolución, mientras que Ignacio Peláez pide que sea inhabilitado durante 10 años, y los imputados en el caso ''Gürtel'' Francisco Correa y Pablo Crespo solicitan que dicha inhabilitación se prolongue entre los 15 y los 17 años.

El magistrado, conocido universalmente por su lucha contra ETA, el narcotráfico y los crímenes de lesa humanidad, tendrá que volver al banquillo a partir del próximo 24 de enero por un presunto delito de prevaricación por investigar el franquismo careciendo de competencias.

Además, está pendiente de saber si el Supremo le abre juicio oral por los pagos que recibió supuestamente del Banco del Santander y otras entidades por organizar unos cursos en la Universidad de Nueva York.