Una vigilancia excesivamente relajada de los padres con su hijos en el uso de internet, a donde acceden cada vez más pequeños, junto con una eclosión de dispositivos móviles y de nuevas redes sociales, disparan los riesgos a los que se exponen los menores en la red.

Varios expertos consultados por Efe, con motivo de la celebración del Día Internacional de la Seguridad de la Información, han coincidido en que la educación y la comunicación entre padres e hijos es uno de los factores prioritarios para garantizar un uso adecuado de las redes sociales por parte de los menores.

El aviso coincide con un texto presentado recientemente por los ministros de Cultura y Audiovisuales de la UE en el que piden, precisamente, a los proveedores de contenidos más esfuerzos para garantizar la seguridad de los menores en la red, con medidas como la clasificación de los contenidos por edades o la inclusión de mecanismos de control.

En España, el director de la Agencia de Protección de Datos (AEPD), José Luis Rodríguez Alvarez, ha advertido, en declaraciones a Efe, de que aún no existen instrumentos para verificar la edad de quienes acceden a las redes sociales, para saber que es realmente cierto que los chicos tienen los años que dicen, y no menos.

Aunque en España existen redes sociales que "sí se toman en serio" lo de la edad de sus usuarios, e incluso supervisan que los chicos tengan al menos 14 años cuando se registran, falta sin embargo un compromiso general de la industria en el asunto de la verificación de la edad, y la AEPD lo está exigiendo "con énfasis".

Juan Quemada, profesor de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Telecomunicación, del Departamento de Ingeniería de Sistemas Telemáticos de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), ha subrayado, en declaraciones a Efe, cómo "la privacidad" de los menores está "muchísimo" más expuesta por la proliferación de redes sociales en internet y un repentino "boom" de dispositivos móviles.

No es que internet sea más peligroso que la sociedad, en general, pero sí resulta muy fácil su acceso, y ello conlleva enormes riesgos para los más pequeños, que no son conscientes de los peligros que implica la red, ha dicho.

Quemada ha explicado que los padres pueden prohibir a un hijo acudir a un barrio peligroso, pero difícilmente pueden controlar que no acceda a ciertos contenidos en la red, incluso con los más sofisticados filtros.

La tradicional estrategia de dejar a los niños en casa sin salir como castigo, parece un sinsentido actualmente, dado que los pequeños en el hogar tienen igualmente el mundo a su alcance, desde un sencillo teléfono móvil o tableta.

Para el presidente de la Asociación de Internautas, Víctor Domingo, se está creando "un mundo virtual paralelo al físico".

"Los padres piensan que las redes sociales e internet son algo distinto a estar en la calle, pero no es así, porque desde el ordenador se puede acceder al mundo", ha explicado.

Domingo ha mostrado su preocupación por el aumento de las suplantaciones de personalidad en las redes, especialmente entre chicas adolescentes, para poner al descubierto en la red las intimidades de algunas de ellas.

También el director técnico de Panda Labs, Luis Corrons, se ha referido al aumento de nuevas redes sociales y herramientas de comunicación en internet y al incremento del número de usuarios que acceden a ellas, a edades cada vez más tempranas.

Ha recordado que muchas veces los chicos no son conscientes de los riesgos de internet, dado su carácter anónimo, y los padres no controlan en muchas ocasiones lo que hacen sus hijos con el ordenador, ni toman medidas para vigilarlos.