El 35% de los establecimientos no conserva adecuadamente los alimentos refrigerados y congelados, según se desprende de un estudio realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), para el que se ha analizado la temperatura de 716 productos refrigerados y congelados en 179 establecimientos para comprobar si la temperatura a la que se encontraban los alimentos era la correcta.

Para realizar el estudio, la OCU eligió dos tipos de alimentos refrigerados de amplio consumo, como la lasaña y la tortilla y un embutido de jamón cocido, paleta o fiambre; y pescado y verdura congelados, y ha observado los propios termómetros de las cámaras, que tal y como ha afirmado la organización, ya indicaban en alguna ocasión que la temperatura no era la correcta según la legislación que regula este aspecto.

Cuando la OCU ha realizado la medición con sus propios termómetros, ha concluido que el 20% de las cámaras incumple la ley al estar las temperaturas por encima de los 8ºC. La situación de las cámaras para refrigerados hace que el 68% de los platos preparados y el 55% de los embutidos estudiados estén a temperaturas superiores a las recomendadas, según la OCU.

En cuanto a los productos congelados, el 16 por ciento de las verduras y el trece por ciento del pescado no cumplen la normativa de temperatura de los alimentos, ha afirmado la organización.

La OCU, además, ha asegurado no haber encontrado diferencias significativas entre cadenas, pero sí por ciudades: Toledo, Barcelona y Badajoz destacan con valoraciones buenas en congelados y aceptables en conservación. Pamplona y Palma de Mallorca son las peor valoradas.

Además, la OCU ha recordado que la cadena del frío no debe romperse y aconseja a los consumidores adquirir estos productos al final de la compra, elegir los que estén al final de la cámara, mirar la fecha de caducidad, descartar los que estén apelmazados o con escarcha, transportar en bolsa isotérmica, y guardar rápidamente al llegar a casa en nevera o congelador.