Un juzgado ha archivado la causa contra dos religiosos de los Hermanos de la Cruz Blanca, cuatro trabajadores y un voluntario de un centro de disminuidos de Dos Hermanas (Sevilla) por supuestos malos tratos a los internos, en una decisión que no va a recurrir la Fiscalía.
Fuentes del caso han informado de que el juzgado número 2 de Dos Hermanas ha considerado que los hechos denunciados por la Junta de Andalucía no constituyen delito de trato degradante o menoscabo de la integridad moral.
Según informó en su día la Fiscalía sevillana, en el caso de los dos religiosos del centro Miguel de Mañana de Dos Hermanas, los supuestos malos tratos se limitaban a dos cachetes propinados a otros tantos internos para reprenderles por su comportamiento.
La investigación contra los trabajadores pretendía dilucidar si llevaban a cabo de forma sistemática prácticas "atentatorias contra la dignidad de los residentes" o simplemente se trataba de un problema de falta de cualificación, según dicha fuente.
De la treintena de disminuidos psíquicos que acudían al centro, los presuntos malos tratos se referían a cuatro, cuyas familias declararon que no deseaban reclamar judicialmente.
La fiscal jefe de Dos Hermanas, María Ángeles Calvo, ha informado de que no va a recurrir el auto de archivo.
La denuncia judicial de malos tratos partió de un anónimo y de una investigación interna llevada a cabo con la Consejería de Igualdad de la Junta.
Desde el principio las investigaciones se centraron en el presunto trato degradante del artículo 173 del Código Penal y descartaron delitos de índole sexual y el supuesto uso de comidas caducadas.
Paralelamente a esta denuncia por malos tratos, el juzgado abrió otra, que quedó archivada en enero de 2011, contra el director de la residencia y el superior de la orden de los Hermanos de la Cruz Blanca, residente en el centro, por instigar un supuesto acoso a los trabajadores que denunciaron malos tratos a los internos.
La denuncia se archivó también por falta de pruebas del presunto acoso laboral y delito contra la Administración de Justicia.
La juez abrió esa segunda causa tras la comparecencia de dos trabajadoras del centro, quienes dijeron que, tras declarar sobre el supuesto maltrato, sus compañeros de trabajo las insultaban y "ni las miraban", supuestamente instigados por los dos religiosos citados.
Por otra parte, en Córdoba están imputados desde mayo de 2010 dos religiosos de los Hermanos Blancos y un laico por los delitos de abusos sexuales y maltrato contra los internos de otro centro de discapacitados de esta congregación y otro voluntario fue condenado en junio del pasado año a cinco años de cárcel por cometer tres delitos de abusos sexuales sobre un interno que padecía un 86 por ciento de minusvalía.