La donación de órganos ha aumentado en el primer semestre del año un 10 por ciento, en relación al mismo periodo del año anterior, según ha anunciado hoy el director de la Organización Nacional de Trasplantes, Rafael Matesanz, quien ha resaltado este incremento tras el descenso registrado en enero.

Matesanz, quien dirige esta semana en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, en Santander, un curso sobre el pasado y el futuro de la donación de órganos, ha adelantado los últimos datos de donaciones, aunque no ha podido precisar las cifras concretas a la espera del cierre del mes de junio.

Aun así, ha insistido en que el aumento ha sido "muy importante" en relación al descenso de donaciones que se registraron al inicio de 2011, de un 6 por ciento en comparación con el mismo mes de 2010.

En rueda de prensa, Rafael Matesanz ha destacado también la importancia de la donación de órganos por parada cardiovascular de personas en la calle, un procedimiento al que ha explicado que se van a sumar hospitales de toda España, aunque desde hace tiempo ya está en marcha en dos de Madrid y en uno de Barcelona, Alicante, Granada, Vitoria y La Coruña.

A partir de ahora, tras un acuerdo entre varias comunidades autónomas y la Organización Nacional de Trasplantes, comenzarán a trabajar en la aplicación de este procedimiento hospitales de Cantabria, Asturias, Navarra, La Rioja, Zaragoza, Toledo, Tenerife, Baleares, Andalucía (Sevilla y Málaga) y Valencia.

Matesanz ha confiado en que "en dos años" estos hospitales ya tengan en marcha los protocolos que permiten la donación de órganos de personas fallecidas por una parada cardiovascular, que en la actualidad supone el 9 por ciento de los trasplantes que se lleva a cabo en España.

Aunque Matesanz ha explicado que el objetivo es llegar en unos años a que "el 20 o el 25 por ciento" de las donaciones de trasplantes sea de fallecidos por parada cardiovascular en la calle, porque ha asegurado que las negativas a donar de los familiares de esas personas son "mínimas".

Sin embargo, ha destacado la necesidad de acuerdos y protocolos con los servicios de emergencias de cada comunidad autónoma o ciudad, ya que son los que atienden en un primer momento al paciente.

Y también ha recordado que para poder donar un órgano de una persona fallecida por parada cardiovascular en la calle, este donante debe tener menos de 55 años. "Probablemente en el futuro, esta edad se pueda aumentar", ha dicho.

El director de la Organización Nacional de Trasplantes ha reconocido que este procedimiento es "uno más" a aplicar para aumentar las donaciones de órganos y que España siga estando en "un puesto privilegiado" en esta materia.

Rafael Matesanz ha destacado el protocolo que, además, se ha puesto en marcha en España para mejorar la relación con los familiares del futuro donante, tanto si es ciudadano español como de otro país que vive en España.

De hecho, ha puesto como ejemplo que solo el 9 por ciento de los familiares de ciudadanos ingleses fallecidos en España se niega a donar sus órganos, mientras que en su propio país el porcentaje llega al 40 por ciento "de negativas".

Matesanz ha achacado esta diferencia del sí a la donación en el caso de los extranjeros al trato que reciben de la Sanidad Pública española y de los protocolos que se están llevando a cabo para mejorar la relaciones con los familiares de personas fallecidas.