El número de fallecidos en accidentes de tráfico se ha reducido casi a la mitad en cinco años después de que bajaran de nuevo en 2009, un descenso que sitúa un año más al suicidio como la primera causa externa de defunción.

Las enfermedades del sistema circulatorio (responsables del 31,2 % del total de fallecimientos), los tumores (27,3) y las enfermedades respiratorias (11,2) siguen siendo las tres causas principales de muerte en España, con lo que se mantiene el patrón de mortalidad del año precedente.

Así se recoge en la estadística de defunciones según la causa de la muerte, que hoy ha hecho pública el Instituto Nacional de Estadística (INE) con datos correspondientes a 2009.

Las cifras ponen de relieve un aumento de los fallecimientos debidos a enfermedades relacionadas con trastornos mentales (10,9%) y las enfermedades del sistema nervioso (7,3%).

En 2009 se produjeron en España un total de 384.933 defunciones, 1.391 menos que las registradas el año anterior.

La tasa bruta de mortalidad se situó en 838,1 fallecidos por cada 100.000 habitantes, lo que supuso un descenso del 1,1% respecto a 2008.

Por sexos, se produjeron 185.838 fallecimientos de mujeres (un 0,4% menos que el año anterior) y 199.095 de hombres (0,3% menos).

Según los datos del INE, los fallecidos por accidente de tráfico se redujeron de nuevo en 2009 y se situaron en 2.588 (un 14,6% menos).

Este descenso situó al suicidio como la primera causa externa de defunción por segundo año consecutivo, con 3.429 personas fallecidas, cifra similar a la de años anteriores.

Por sexos, se produjo una acentuada sobremortalidad masculina: ocho de cada diez personas que se suicidaron fueron hombres.

Continúa la tendencia ascendente de muertes por tumores (1% más), mientras que disminuyeron los casos debidos a enfermedades circulatorias (2,2%) y respiratorias (2,1%).

El grupo de enfermedades del sistema circulatorio se mantuvo como la primera causa de muerte en las mujeres, mientras que en los hombres fueron los tumores.

Los fallecimientos por causas externas (principalmente accidentes de tráfico y suicidios) fueron más frecuentes en los varones.

Por el contrario, las defunciones originadas por enfermedades endocrinas, nutricionales y metabólicas (como la diabetes mellitus), las del sistema nervioso (como el Alzheimer) y los trastornos mentales (demencias) fueron más elevadas en las mujeres.

En 2009 fallecieron 1.079 personas por Sida/VIH, un 11,2% menos que el año anterior, y es el mayor descenso de los últimos once años.

Por comunidades autónomas, las tasas más elevadas de fallecidos por cada 100.000 habitantes corresponden a Asturias (1.206,9), Galicia (1.102,7) y Castilla y León (1.081,3), lo que se explica en parte, según el INE, en el hecho de que tengan una población más envejecida.

Por su parte, las tasas de mortalidad más bajas se presentaron en Canarias (618,2), Comunidad de Madrid (655) y en la ciudad autónoma de Melilla (569,2).